El transporte decide la semana próxima si se moviliza contra los peajes de Guipúzcoa

Las asociaciones del sector ya han consultado a sus socios qué hacer y consensuarán las medidas de presión a adoptar durante la primera semana de enero en el ámbito del Comité Nacional del Transporte.

15/12/2017 a las 2:08 h

La reunión que el Comité Nacional del Transporte por Carretera va a mantener la semana próxima se antoja decisiva para que las asociaciones del sector decidan finalmente si van a llevar a cabo movilizaciones para protestar por el establecimiento de peajes para vehículos pesados en Guipúzcoa en la primera semana de enero.

Antes del encuentro, cada asociación ya habrá consultado a sus asociados qué quieren hacer y llevará sus opiniones al Comité para ver si se ponen de acuero.

Existen diferentes posiciones al respecto, aunque todas ellas parten de un mismo posicionamiento: en principio, los empresarios del transporte de mercancías por carretera son contrarios a cesar su actividad porque eso va contra los intereses económicos de las propias empresas y de sus clientes.

Sin embargo, son varias las posibilidades que podrían plantearse para protestar contra una medida que el transporte considera que perjudica gravemente no solo al sector, sino a la propia competitividad internacional de las empresas españolas.

En este sentido, el Comité parece más partidario de tomar medidas que afecten exclusivamente al tránsito de vehículos pesados por la provincia de Guipúzcoa.

Así las cosas, podría optarse por no realizar labores de carga y descarga en este territorio durante la primera semana de enero o incluso podría tomarse la decisión de no circular por las carreteras guipuzcoanasen los primeros días de 2018, utilizando para ello otras alternativas en los tráficos de transporte internacional, por ejemplo.

El sector es consciente de que el ejemplo de la Diputación de Guipúzcoa puede extenderse a otros territorios en lo que, para algunos y junto con el número creciente de desvíos a vías de alta capacidad desde carreteras convencionales por obras o por motivos de seguridad vial, se antoja como una llegada de tapadillo de la euroviñeta a nuestro país.

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