La CNMC estima que Aena deberá reducir entre un 2 y un 3% las tasas aeroportuarias a partir de 2016

La CNMC ha publicado los nuevos criterios que determinan si se ha realizado una correcta separación y asignación de los costes asociados a las actividades aeroportuarias reguladas y las comerciales.

04/05/2015 a las 21:54 h

Sede de Aena en Madrid.

Informe sobre los criterios de separación de los costes de las actividades aeroportuarias y comerciales de Aena que puede descargarse en este enlace(disponible en formato pdf, de 61 páginas, 1 Mb).

Aena debe bajar las tasas aeroportuarias entre un 2% y un 3% para los próximos ejercicios a partir de 2016, según las actuales previsiones, y basándose en los nuevos criterios establecidos en la modificación tarifaria por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, CNMC, que se aplicará desde el próximo año.

Según estos criterios, se aplicará un ajuste de 69,8 millones de euros en los costes que se atribuyen actualmente a las actividades aeroportuarias, lo que supondría una reducción del coste de las prestaciones públicas, o tasas aeroportuarias, de 41,9 millones de euros para 2016.

Esta es una de las conclusiones que se extrae del informe emitido por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre la consulta pública que lanzó el organismo regulador, en diciembre, sobre cómo deben imputarse los costes de las actividades comerciales y las aeroportuarias en los aeropuertos de la red de Aena.

Según el informe, el actual modelo de contabilidad utilizado infravalora los costes de las actividades comerciales, que se tratan como una actividad adicional sobre la aeroportuaria, lo que provoca que "existan costes relevantes" que "no se están considerando de manera correcta". En concreto, ve costes relevantes en cuanto al sobredimensionamiento de los edificios terminales y al especial diseño de las áreas comerciales de las terminales.

El informe de la CNMC, que llega iniciado el proceso de consultas entre Aena y el sector a cuenta de las tasas aéreas, señala la metodología que utilizará en el ejercicio de sus competencias de supervisión durante 2016 y próximos ejercicios, en un momento con el tráfico aéreo al alza, que podría rondar un aumento del 4% para este año.

Actualmente, las tasas aeroportuarias están congeladas hasta el año 2025, según se recoge en el nuevo marco regulatorio, denominado Documento de Regulación Aeroportuaria (DORA), creado para dar entrada al capital privado en Aena.

Nueva metodología

El pasado 17 de diciembre la CNMC puso en marcha un proceso de consulta pública dirigido a garantizar la mayor precisión en la cuantificación de los costes para determinar las modificaciones tarifarias que debe aplicar Aena y la metodología que se debe utilizar para supervisar el reparto.

Para el 2016, primer año en el que deberían aplicarse estos criterios, supone una reducción del coste de las tasas aeroportuarias de 41,9 millones de euros, de acuerdo a la implantación gradual del modelo de doble caja, o 'dual till', establecido en la normativa.

Este proceso, que ya había sido anticipado en la resolución de la CNMC de 11 de septiembre de 2014 por la que se aprobó la modificación tarifaria de Aena para 2015, implica que Aena detraerá un 60% de los ingresos comerciales para el cálculo de la actualización de las tasas aeroportuarias, reduciéndose dicho porcentaje en años sucesivos.

De acuerdo al modelo de 'duall till', que se aplicará de forma gradual hasta su implantación en 2018, se añadirán los gastos de explotación y de capital de las actividades relacionadas con precios privados de las áreas terminales y se deducirán los ingresos correspondientes a las mismas. En función del año de aplicación, será del 80% para 2014, del 60% para 2015, del 40% para 2016, del 20% para 2017 y del 0% para 2018.

Los nuevos criterios determinan si se ha realizado una correcta separación y asignación de los costes asociados a las actividades aeroportuarias reguladas y las comerciales, que están vinculadas a las áreas terminales de los aeropuertos de Aena.

Además, sirven para fijar las tasas aeroportuarias que deben pagar las compañías aéreas, dado que estas solo pueden tener en cuenta los ingresos y costes asociados a las actividades aeroportuarias.

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