La UE pide a Suardíaz las previsiones de tráfico para aprobar la Autopista del Mar de Vigo

La Unión Europea podría añadir hasta 3 millones de euros a la ayuda de los estados español y francés para poner en marcha el proyecto de Suardíaz.

14/02/2014 a las 11:59 h

El proyecto de la naviera Suardíaz de poner en marcha una línea de autopista del mar subvencionada entre Vigo y Nantes tendrá que cumplir todavía un requisito importante antes de conseguir el visto bueno definitivo y la cofinanciación de la Unión Europea, según ha publicado el diario El Comercio.

A instancias de esta última, deberá presentar las previsiones de tráfico y de gastos, con vistas a comprobar la viabilidad de la conexión.

En principio, las previsiones de Puertos del Estado son buenas, ya que augura que la autopista del mar viguesa podría ser aprobada en marzo y recibir una ayuda europea de hasta 3 millones de euros, adicionales a las ayudas estatales, 30 millones, de los gobiernos de España y Francia.

La Unión Europea ha puesto énfasis en un dato fundamental y que puede ser problemático, tanto para el Grupo Suardíaz como para la autopista del mar de Gijón, que son las previsiones de retirar tráfico pesado de las carreteras europeas, objetivo comunitario básico para justificar la concesión de subvenciones.

El actual tráfico de carga rodada entre Vigo y Nantes, que ya opera Suardíaz, pero sin subvenciones, se fundamenta en el transporte de coches sin matricular producidos en la factoría viguesa de Peugeot-Citroën con destino a Francia, que nunca se ha realizado por carretera, pues utilizó siempre el modo marítimo. No será, por tanto, eso lo que valoren las autoridades europeas. 

Por otra parte, el Grupo Suardíaz parece obligado a centrar sus objetivos comerciales en la captación de carga no acompañada si realmente quiere ser alternativa a la carretera, ya que, salvo que flete un barco alquilado, que no es lo que ha dicho hasta el momento, su flota propia apenas tiene camarotes disponibles para los transportistas.

Competencia con Gijón

En esas condiciones, si el proyecto de autopista del mar de Vigo no logra satisfacer el nuevo requerimiento sobre previsiones de tráfico de la Unión Europea podría quedar en nada, por muy a punto de la aprobación definitiva que ahora se pueda plantear.

Pero si logra convencer a las autoridades europeas, y no parece posible hacerlo si no es con unas previsiones ciertas de clientes claramente potenciales, los problemas serían para el proyecto gijonés.

Por mucho que la línea de Vigo esté orientada a la carga no acompañada, entre otras cosas por la misma duración de la travesía, y por mucho que ocurra lo contrario en el caso de El Musel, ambas competirían por un mismo mercado, el transporte entre España y Francia, y en un mismo espacio, el cuadrante Noroeste peninsular.

El director comercial del puerto de Gijón, Ignacio Merino, cifró en el 60% las mercancías transportadas por la línea El Musel-Nantes que tienen origen o destino en Portugal, de forma que la alternativa de Vigo puede ser una opción real, especialmente si las subvenciones facilitan la competencia en precios.

Cabe recordar, en ese sentido, que la autopista del mar asturiana acaba las ayudas el próximo septiembre, de forma que prácticamente podría coincidir la irrupción en el mercado de la nueva oferta subvencionada con la pérdida de las ayudas por LDLines, como ya se ha ocupado de advertir la presidenta de El Musel, Rosa Aza.

Si a todo ello se añade que Brittany Ferries aumenta su oferta desde Santander, la duda ahora es si habrá demanda para tanto transporte hispanofrancés.

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