Los estibadores del puerto de Setúbal iniciaron sus movilizaciones a comienzos de noviembre.
Con la incorporación esta misma semana de los estibadores temporales de las dos terminales que aún estaban en funcionamiento a la movilización, el puerto de Setúbal permanece prácticamente parado, pese a que para los últimos días de noviembre estaba prevista la llegada al enclave de un total de 21 buques dedicados al transporte de mercancías y que no podrán ser desestibados.
Esta situación, que arrancó a primeros de mes, está suponiendo el desvío de tráficos de vehículos terminados hacia los puertos de Leixoes, Santander y Vigo, enclaves que se están beneficiando de los problemas de Setúbal para mover los vehículos para la exportación que produce a diario la factoría que Volkswagen tiene en Palmela, localidad próxima a Lisboa y que se envían por carretera a estos tres recintos portuarios para su embarque con destino a otras zonas de todo el mundo.
En los últimos días de noviembre se han intensificado, además, los contactos entre los trabajadores portuarios del enclave y el Gobierno portugués con el fin de encontrar una solución que reduzca la temporalidad entre los estibadores del puerto de Setúbal para entre 48 y 30 trabajadores, aunque mientras que las terminales quieren que los estibadores vuelvan a sus puestos como señal de buena voluntad, el colectivo de la estiba de Setúbal aboga por paralizar el recinto portuario para forzar un acuerdo.