Antes de que dé comienzo el proyecto K9 en 2018, que supondrá la producción de una nueva generación de furgonetas, el grupo PSA Peugeot Citroën ha comenzado el ensamblaje en la planta de Vigo de las primeras unidades de la Berlingo y la Partner a las que se ha sometido a un segundo proceso de 'restyling' como parte de la estrategia para mantener las ventas hasta, al menos, 2018, justo antes de su relevo por los nuevos modelos, según informa el 'Faro de Vigo'.
Estos dos modelos formaron parte del proyecto B9 y salieron a la venta en la primavera de 2008. Cuatro años más tarde, en 2012 ambas ya fueron sometidas a un primer proceso de actualización de su aspecto aprovechando la celebración del salón mundial del automóvil de Ginebra. En este caso, se espera un 'restiling' tanto en el interior como en el exterior de los vehículos.
El sustituto de la Berlingo y la Partner en 2018
En el caso del proyecto K9, el relevo no se produciría hasta mediados de 2018, después de que la producción de los dos nuevos modelos comience, también en la fábrica de Vigo, a partir del 2017. Dentro del secretismo que envuelve este proceso, el diario gallego recoge que la multinacional francesa tiene previsto que las siluetas de las nuevas unidades sean mucho más diferentes entre sí que los actuales Citroën Berlingo y Peugeot Partner.
La producción de los nuevos vehículos comerciales se producirá dentro de la nueva estrategia del grupo PSA por reducir su número de modelos de los 45 actuales a los 26 hasta 2022 y la conversión de la línea DS de Citroën en una marca independiente, elevándola hasta una categoría premium. En concreto, el objetivo es convertir Peugeot en el Volkswagen francés y dejar a Citroën en una marca más generalista.