La reunión mantenida este martes 14 de febrero entre Fomento, Anesco y los estibadores en la sede del Ministerio ha finalizado sin acuerdo, con lo que se mantienen las jornadas de huelga convocadas por los sindicatos para los días 20, 22 y 24 de febrero y la intención del Gobierno de aprobar la reforma en el Consejo de Ministros del 17 de febrero.
El registro de estibadores que proponen los sindicatos ha sido el principal obstáculo para alcanzar una posición común, en una reunión a la que los agentes implicados llegaban en un clima tenso. Apenas 24 horas antes del encuentro, el ministro de Fomento, Iñigo de la Serna, presente en la reunión de este martes, denunciaba actos de sabotaje en los puertos.
[youtube video="pGBa35daUk8" ancho="480" alto="300"]
Lejos de relajar los estados de ánimo, la reunión de este 14 de febrero parece haber polarizado aún más las posiciones, sin que el borrador de Fomento, trasladado a las partes a principios de febrero, haya sufrido ningún cambio.
En la rueda de prensa posterior al encuentro, sindicatos, empresas y Gobierno han trasladado informaciones que se contradicen.
La parte sindical ha sido la primera en exponer sus conclusiones de la reunión, que ha durado poco más de una hora. Antolín Goya, coordinador general de Coordinadora, ha asegurado que los estibadores han flexibilizado su posturacon respecto al encuentro del pasado viernes, tras estudiar el texto de la reforma de Fomento en los últimos días.
Nadie ha ido a negociar
Según Goya, el Ministerio de Fomento no ha llegado dispuesto a negociar. "Hemos planteado una serie de modificaciones al borrador del Real Decreto, haciendo un esfuerzo por entender la postura defendida por el Gobierno en contra de la creación de un registro de trabajadores", ha asegurado el coordinador general del sindicato.
"Hemos incluso hablado de la posibilidad de no constituir un registro de estibadores en los términos que veníamos defendiendo", aunque manteniendo la necesaria cualificación de los profesionales. "Sin embargo, lo que nos hemos encontrado es una posición cerrada del Ministerio, que no ha entrado a valorar ninguna de las propuestas de los sindicatos ni de la patronal", ha afirmado Goya.
De la Serna preside la reunión entre Fomento, Anesco y estibadores.
Por el contrario, el secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez-Pomar, ha señalado que los sindicatos han presentado en la reunión el mismo documento que trasladaron el 24 de julio de 2015, lo que contradice la versión de Coordinadora.
"Todos los documentos que está presentando la parte sindical pivotan sobre la existencia de un registro de trabajadores, sobre el mantenimiento de hecho de las Sageps y sobre una restricción a la libertad de establecimiento, imponiendo obligaciones de contratación a las empresas", ha apuntado el secretario de Estado de Infraestructuras.
Minutos después de que Goya asegurase que el Ministerio no había ido a negociar con las partes, Gomez-Pomar ha criticado "la intransigencia de los sindicatos en el proceso de negociación", ya que "no ha habido en la reunión ninguna intención de la parte sindical de no negociar otra cosa que no sean sus exigencias", ha apuntado.
Desde Fomento también han denunciado medidas de "presión y coacción" sobre las empresas "al implicarlas en una negociación no queridas por muchas de ellas".
La misiva de Anesco
Entre las explicaciones de los sindicatos y las de la Administración ha llegado la misiva de Anesco. El director general de la asociación, Pedro García Navarro, ha leído la carta firmada por las empresas, sin contestar a preguntas de los medios al no poder hablar por todas las sociedades que integran Anesco, según ha explicado.
La misiva de la asociación apunta "huelgas ilegales encubiertas y selectivas" desde que se conociera la reforma que plantea Fomento, "bajadas de producción organizadas y graves actos vandálicos contra maquinarias y mercancías en las instalaciones". García Navarro también ha hablado de "presión" a las empresas para firmar el documento que patronal y sindicatos debatían y que no llegó a ser ratificado por la asociación.
Desde la asociación no han explicado la postura que han mantenido durante la reunión y el proceso de negociación, pero sí lo ha hecho Gómez-Pomar.
[sumario]Anesco se opone a la mayor parte de los elementos de flexibilización que figuran en el Real Decreto Ley.[/sumario]
El secretario de Estado ha apuntado que Fomento buscaba la mayor flexibilización posible en la garantía del empleo. En este ámbito entrarían el periodo transitorio de tres años, el apoyo financiero a la subrogación, la transformación de la SAGEP o la creación de los Centros Portuarios de Empleo.
Gómez-Pomar habla de intransigencia por parte de los sindicatos y de falta de flexibilización por las empresas.
Según el propio secretario, Anesco se opone a la mayor parte de los elementos de flexibilización que figuran en el Real Decreto Ley. Las empresas estibadoras se han mostrado en contra de que el Real Decreto contemple la creación de los Centros Portuarios de Empleo y de otorgar un año para la negociación del convenio. Además, consideran que ellas son las que deben decidir sobre los requisitos de capacitación y profesionalización que quieran exigir.
Negociación colectiva una vez aprobada la reforma
Gómez-Pomar también ha señalado que el borrador de la reforma ya ha recibido el visto bueno de la Comisión Europea, por lo que, de aprobarse este viernes 17 de febrero, España evitaría la multa de 134.000 euros al día y por la que el Estado debería abonar ya un total de 21,5 millones de euros.
La intención de Fomento es aprobar la reforma. Posteriormente, en el campo de la negociación colectiva "se pueden negociar las principales cuestiones que plantean los sindicatos, como la subrogación de los trabajadores, la experiencia y las prácticas, materias propias de los convenios colectivos", aseguran desde el Ministerio.