Renfe afronta en 2019 la puesta en marcha de su Plan Estratégico para convertirse en un referente a nivel internacional, mientrasse adapta junto al Administrador de Infraestructuras a los cambios que supondrá para el sector la liberalización del transporte de viajeros.
La generalización de las herramientas digitales ha permitido un mayor control de las decisiones relacionadas con la explotación y una mejora de la calidad del servicio.
La amenaza de una nueva crisis económica a nivel mundial, el ‘Brexit’ o las guerras comerciales llenan de incertidumbre un sector que tiene que hacer frente a los costes de la entrada en vigor del nuevo límite de azufre de la OMI el próximo 1 de enero de 2020.
Es necesario que empresas, trabajadores y administraciones públicas abordemos los retos de presente y futuro conjuntamente, puesto que nuestros intereses son comunes.
Muchos armadores esperan la entrada en vigor del nuevo límite de azufre en 2020 sin saber todavía como van a aplicar la norma en su flotas.
En 1991 la participación del transporte ferroviario en el total era del 9%, que es la cuota que se quiere recuperar para el 2025.
“En el último trimestre de 2018 ha descendido la producción industrial, que sumado al del tercer trimestre, marcan una recesión en el sector de la fabricación”.
El pasado 2018 ha sido un año de novedades en diferentes segmentos de vehículos comerciales e industriales que se han centrado en modelos eléctricos, principalmente dentro de los segmentos de furgonetas y distribución regional, así como en conectividad.
Las 44 toneladas no son un capricho de los cargadores sino una medida prescindible para asegurar la sostenibilidad y frenar el cambio climático.
Mientras no seamos capaces de actuar, de manera conjunta, a través de los planes de inspección y desde la normativa, el sector irá precarizando sus condiciones laborales.
Los resultados del año pasado, con un aumento del 32% respecto de 2017 remarcan que cada año se mueven más mercancías por carretera en la península ibérica
La presencia de flotas extranjeras de los países del Este en el transporte español supone ya casi una tercera parte del transporte internacional con origen o destino en España.
Tanto los cargadores como el regulador deben tomar decisiones que salvaguarden un sector tan importante como es el del transporte.
La tecnología, las energías alternativas al gasóleo, la conectividad y la conducción autónoma se configuran como retos de futuro para un sector que se asoma a una década que se antoja plagada de innovación.
Tal es la preocupación por la salida del Reino Unido de la UE que España ya ha preparado un plan de contingencia en el plano normativo, logístico e informativo.
En 2018 ha crecido la contratación, con más de 1,3 millones de contratos suscritos durante todo el año, y el número de afiliados a la Seguridad Social en el sector logístico y de transporte, que ya supera los 900.000.
Tras la presión de los transportistas, la responsabilidad por la incorrecta sujeción de las mercancías recaerá en los cargadores.
Se trata de resolver cuanto antes los desafíos de la digitalización y robotización para evitar ciudadanos en nuestro país ‘excluidos con trabajo’ y ‘excluidos sin trabajo’.
Las nuevas demandas de los operadores para atender el imparable crecimiento del comercio electrónico y unos plazos de entrega cada vez más ajustados marcarán un nuevo curso en el que los proyectos seguirán concentrándose en Madrid, Barcelona y Valencia, aunque con la mirada puesta cada vez más hacia otras zonas de España con posibilidades de crecimiento y buenas comunicaciones con el exterior.
Tecnologías que ya existen, cuyo uso tienen ventajas comprobadas, pueden ayudar a reducir comprobaciones, errores de información y facilitar a los mecanismos aduaneros su tarea.