En su apuesta por una movilidad inteligente y sostenible, la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones, Anfac, ha creado un comité de trabajo dedicado específicamente al vehículo eléctrico y alternativo.
Integrado por expertos en la materia de sus marcas asociadas, su intención es trabajar en propuestas para fomentar la movilidad eléctrica y alternativa, como la aplicación de un plan estructural de incentivos, dotado de 150 millones de euros anuales, para la adquisición de vehículos alternativos.
También pretenden lograr más ayudas a la instalación de puntos de recarga públicos de electricidad, gas y pila de combustible, así como la flexibilización o eliminación del marco regulatorio del gestor de carga.
En esta línea, consideran que es necesaria una adecuada planificación de infraestructuras de carga rápida para incrementar la cuota de mercado del vehículo eléctrico y alternativo. Además, plantan cambios en la fiscalidad, con un único impuesto, más verde y exigente, que grave el uso en lugar de la compra, y un IVA reducido para vehículos alternativos.
Por último, llaman a la homogeneización de la normativa para este tipo de unidades a nivel local, autonómico y estatal, para lo que piden potenciar el etiquetado medioambiental de la Dirección General de Tráfico, DGT, para favorecer la circulación en zonas de baja emisiones y la obtención de bonificaciones en zonas de aparcamiento regulado o en carriles Bus-Vao.