Los días 26 y 27 de enero ha tenido lugar en Río de Janeiro, la V Asamblea General de IDC (International Dockworkers Council – Consejo Internacional de Estibadores), máximo órgano de poder de esta organización internacional, que ratificó a Antolín Goya como coordinador general de esta institución para los próximos dos años, en el que será su tercer mandato.
Uno de los principales acuerdos de esta Asamblea fue la aceptación como miembros de pleno derecho de IDC a los trabajadores de los puertos africanos de Costa de Marfil, Togo, Benín, Gambia, Guinea Bissau, Ghana y Mauritania y los sudamericanos Colombia, Ecuador, El Salvador y Honduras.
Actualmente los afiliados a esta organización suman 60.000 personas, entre ellas los trabajadores de los puertos españoles.
Nuevas tecnologías y formación
La Asamblea ha acordado hacer una apuesta clara por las nuevas tecnologías en los puertos de todo el mundo, conscientes de que es el reto que exige el futuro y la condición imprescindible para la garantía de puestos de trabajo estables y de calidad.
También se considera imprescindible apoyar y exigir la formación continuada, sobre cualquier aspecto relacionado con las labores de la estiba para la consecución de un trabajo de óptima productividad y seguridad laboral. Con el fin de reforzar el aprendizaje en cualquier puerto del mundo, los estibadores miembros de IDC acordaron idear un sistema de comunicación entre los afiliados para compartir información y experiencias, para reforzar la coordinación de todos los enclaves marítimos internacionales.
Otro de los puntos importantes de las resoluciones de este encuentro ha sido el acuerdo de reclamar la aplicación del convenio 137 de la OIT, que exige para los trabajadores portuarios, debido a sus características especiales, unas condiciones dignas de trabajo permanente, a todos los países firmantes de esta resolución, los miembros de la OIT, así como el impulso de ratificación por parte de aquellas naciones que no lo sean.
La Asamblea de IDC se comprometió a apoyar de manera decidida la lucha de los estibadores de Portugal, que reivindican el respeto al convenio colectivo y a sus puestos de trabajo, así como a los trabajadores portuarios de los puertos de Buenaventura, en Colombia, de El Salvador y de Honduras, que exigen condiciones de trabajo estables y justamente remuneradas.
Como conclusión, la Asamblea ratificó la postura de cohesión de los estibadores internacionales, así como la intención de dar una respuesta sindical común frente a las navieras que pretendan socavar los derechos de los trabajadores a un empleo con garantías, en cualquier enclave del mundo.