La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) pasará a ostentar la titularidad de Correos, sociedad postal pública hasta ahora dependiente de la Dirección General de Patrimonio del Estado.
Se trata de una de las medidas aprobadas por el Gobierno en el marco del plan de reestructuración y racionalización del sector público empresarial y fundacional.
El Ejecutivo ha decidido este traspaso a la SEPI, al considerar que las características de este holding de empresas públicas se adapta mejor a las de la empresa postal.
Correos inicia así una nueva etapa en su historia, después de que hace unos años, cuando la actividad postal se abrió a la competencia, saliera del ámbito del Ministerio de Fomento para pasar a la Dirección General de Patrimonio, dependiente del Ministerio de Hacienda.
Este nuevo cambio de adscripción de Correos coincide además con el nombramiento de Javier Cuesta Nuin como nuevo presidente de la compañía, que además se enfrenta a los retos de la plena liberalización del sector.
Correos está actualmente integrada por cuatro sociedades:
• Correos, que realiza la tradicional actividad de servicios postales, paquetería, marketing directo y certificaciones electrónicas
• Correos Telecom, la de servicios tecnológicos
• ChronoExprés, transporte urgente y paquetería y
• Nexea la gestión documental masiva de empresas con sus clientes.
De esta forma, la empresa ha buscado diversificar su actividad desde la tradicional gestión de cartas.
El grupo es una de las empresas españolas con mayor plantilla, dado que suma 62.000 trabajadores, que anualmente gestionan más de 4.400 millones de envíos.
Además, Correos tiene una flota de 14.000 vehículos para el transporte y distribución de envíos con distintas capacidades de carga, que va desde camiones hasta motocicletas. La sociedad opera a través de una red de 2.360 oficinas multiservicio, que diariamente 250.000 clientes, 64 centros logísticos.