A pesar de que 2013 ha comenzado con una bajada de la prima de riesgo y con el fantasma del rescate alejándose, la mayoría de los expertos inmobiliarios se muestran aún pesimistas y pronostican otro año de recesión y paro para la economía española.
En cuanto a la logística, la caída de la producción industrial durante 2012 deja entrever un comportamiento cada vez más selectivo por parte de los actores logísticos y deja poca esperanza para las naves de segunda mano. Como consecuencia, la tasa de desocupación, al alza, debería progresar y las rentas seguir disminuyendo. Los inversores consultados esperan una bajada tanto en las rentas faciales (3%) como en las rentas económicas (10%).
Estos son los datos de la encuesta realizada por la consultora inmobiliaria Tinsa junto a IPD, especialista en el análisis de mercados inmobiliarios, en una nueva edición del Barómetro IPD/ Tinsa. El estudio permite conocer de primera mano previsiones fundamentales, claves del comportamiento de inversión y estrategia de importantes jugadores en el mercado español.
El informe analiza las opiniones y pronósticos de profesionales nacionales y extranjeros recogidos en una encuesta. En concreto una veintena de variables han sido pronosticadas por los 15 participantes en la encuesta.
La financiación se normalizará a partir de 2015
Ante esta coyuntura económica, por primera vez, un 9% de los panelistas retrasa a después de 2015 la estimación del comienzo de crecimiento del PIB, aumentando del 50% al 58% el porcentaje de entrevistados que estima que se producirá en 2015 y disminuyendo hasta el 33% aquellos que creen que se producirá en 2014.
Respecto a la inversión, la financiación seguirá con restricciones y las estrictas condiciones de concesión de préstamos llevan a la mayoría de los encuestados a estimar que la financiación al sector inmobiliario no se normalizará hasta 2015.
El inversor del año fue el privado nacional y esta tendencia continuará en 2013, sin embargo, con el alejamiento de los rumores de rescate y salida del euro, parece que España vuelve a entrar en escena y ya se percibe la presencia de inversores extranjeros analizando operaciones y manteniendo la cautela ante posibles bajadas de precio.
Los encuestados esperan la llegada de capital extranjero de la mano de fondos oportunistas de tal forma que la inversión internacional llegará a igualar a la nacional e incluso superarla para el 33% de los expertos encuestados.