El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes el Plan PIMA-AIRE de incentivos a la compra de vehículos comerciales dotado de un presupuesto de 40 millones de euros. El objetivo principal de esta medida es promover la mejora medioambiental y la mejora de la calidad del aire, al mismo tiempo que estimula la actividad económica.
Las ayudas del Gobierno para comerciales estarán divididas en dos partes. La primera será para vehículos de hasta 2,5 toneladas, que recibirán 1.000 euros por parte del Gobierno y 1.000 euros de la marca, mientras que los modelos de entre 2,5 y 3,5 toneladas recibirán un total de 4.000 euros, 2.000 euros de ayudas públicas y 2.000 euros de las compañías.
Este plan está orientado fundamentalmente a pymes y autónomos, para que puedan renovar su flota de vehículos comerciales. Con esta iniciativa se persigue renovar las furgonetas antiguas que desarrollan las labores de reparto en las ciudades, y poner en circulación vehículos más eficientes.
Su puesta en vigor era largamente esperada por el sector, tanto por estar dirigido específicamente a los profesionales, como por su efecto en elsaneamiento de un parque cuya antigüedad media supera los 10 años.En este sentido, se estima que que los nuevos vehículos adquiridos reducirán en un 70% las emisiones de NOx y en un 15% las de CO2, además de ahorrar unos 15 millones de litros de combustible al año.
Con la aprobación de este plan se impulsará la fabricación de vehículos comerciales ligeros. Cabe destacar que España es el primer productor europeo de este tipo de vehículos. El efecto multiplicados que tiene el sector del automóvil, en fabricación y distribución, además, permitirá el mantenimiento del tejido empresarial, conservando puestos de trabajo.
El sector del automóvil ha manifestado su satisfacción por esta iniciativa que “servirá para luchar contra el cambio climática y mejorar la calidad del aire” además de que la modernización de la flota de vehículos elevará la productividad global, así como la actividad económica.
Los vehículos comerciales comenzaron el año en números rojos. A excepción del segmento de las furgonetas, todos los sectores ha descendido una media de 17,7% y los furgones han retrocedido más del 20%. Sin embargo, la puesta en marcha del Plan PIMA hace prever que probablemente se consiga aumentar el ritmo de renovación del parque circulante e incrementar el volumen de ventas durante el año 2013.