El 30% de los vehículos que circulan por las carreteras vascas tiene más de 16 años.
En el mes de marzo de 2019, el País Vasco lanzará por primera vez ayudas para la renovación de vehículos de más de diez años, que estarán destinadas a la compra de modelos de cualquier tecnología.
La administración autonómica pretende reducir las emisiones contaminantes, y para ello ha preferido apostar por la neutralidad tecnológica. El Plan se enmarca en un amplio paquete de medidas para la mejora de la eficiencia energética.
La patronal de los concesionarios, Faconauto, ha valorado positivamente esta iniciativa, que "ha acertado en el diagnóstico del problema de la renovación del parque automovilístico, que pasa necesariamente por apostar por todas las tecnologías disponibles".
El modo más eficaz para asegurar a corto y medio plazo una movilidad sostenible en el País Vasco es, a su juicio, propiciar la retirada de la circulación de los vehículos más antiguos, contaminantes e inseguros.
La edad media en esta región se sitúa en 11,4 años y el 30% de los vehículos que circulan por sus carreteras tienen más de 16 años. Por ello, la Federación apoya esta medida y cree que "debería ser la línea para seguir, especialmente por el Gobierno central", dado que de momento sólo pretende apostar por los vehículos eléctricos.
En este sentido, consideran fundamental "dar pasos intermedios" hacia una movilidad descarbonizada, en los que todas las tecnologías disponibles sean tenidas en cuenta.