En el ejercicio 2019, se prevé una leve ralentización de la demanda de transporte de contenedores, que pasará del 4,7% en 2018 al 4%. Aunque la cifra es bastante respetable y aumentará el movimiento de contenedores en más de 30 millones de TEUs, aún es difícil dar datos con seguridad teniendo en cuenta la guerra de tarifas entre Estados Unidos y China, el posible impacto del Brexit, etc.
Esta es una de las perspectivas que plantea la consultora Drewry, para la que los operadores e inversores seguirán siendo muy cautelosos a la hora de invertir en nueva capacidad al no poder obtener los mismos retornos que antes.
Incluso los actores del mercado chino podrían verse afectados si su economía se ralentiza. Los proyectos de nueva construcción serán los más perjudicados por esta situación, pero aún así, se espera una capacidad adicional de más de 25 millones de TEUs, lo que supondrá un gasto de unos 7.500 millones de dólares (6.542 millones de euros).
La buena noticia para la industria es que no habrá un incremento significativo en las dimensiones de los portacontenedores, aunque sí seguirá aumentando su capacidad. Sin embargo, los buques más grandes seguirán reemplazando a los más pequeños en todas las rutas y los puertos estarán cada vez más presionados para acoger buques de gran tamaño.
Nuevas tecnologías y fuentes de ingresos
A lo largo de 2019, los terminalistas y Autoridades Portuarias continuarán explorando las oportunidades que ofrecen la digitalización, automatización, el blockchain, los puertos inteligentes, el Internet de las Cosas o la tecnología 'Hyperloop', entre otras. El gran reto consiste en centrarse en las que realmente funcionan y tienen un mayor potencial.
En relación con lo anterior, los operadores de terminales y los puertos continuarán ampliando sus actividades más allá de sus instalaciones, fomentando una cadena de suministro más amplia para intentar diversificar las fuentes de ingresos y acercarse a los cargadores.
A pesar de todos estos cambios, la industria de las terminales de contenedores seguirán manteniendo un negocio sólido. Se prevé un movimiento de más de 800 millones de TEUs en 2019 que generará un EBITDA de más de 25.000 millones de dólares (21.807 millones de euros).