La DGT presentará en febrero su propuesta para una nueva Ley de Tráfico y Seguridad Vial

La normativa incluye una reforma del modelo de formación vial, la implantación de nuevos radares y la revisión del carnet por puntos.

11/01/2018 a las 20:30 h

Los radares ya discriminan por tipo de vehículo Se implantarán más radares en carreteras convencionales, así como nuevos radares de tramo, con el fin de mejorar la seguridad.

La Dirección General de Tráfico, DGT, enviará a mediados de febrero al Ministerio del Interior su propuesta para una nueva Ley de Tráfico y Seguridad Vial, con el objetivo de que se apruebe en 2018.

La nueva normativa contemplará la modificación del Reglamento General de Vehículos y del Reglamento de Auxilio en Carretera. Asimismo, se pretende reformar el modelo de formación vial, para lo que Tráfico ha dialogado con todos los sectores implicados.

El objetivo es modificar la manera de examinar, en lugar de centrarse en pasar un test. Esto evitará que se presente al examen gente que no ha pasado por la autoescuela y contribuirá a aumentar la concienciación en materia de seguridad vial. La reforma incluirá una revisión del carnet por puntos, con el consiguiente aumento o disminución de las sanciones.

Por otro lado, desde la DGT han confirmado que en 2018 se aprobará el protocolo para que los reincidentes por delitos relacionados con consumo de alcohol y drogas puedan perder el carnet si lo dictamina un médico. Se considerarán reincidentes a aquellos conductores que tengan dos o más sanciones por delitos de alcohol o drogas en un periodo inferior a dos años.

Nuevos radares y drones de vigilancia

En cuanto a la velocidad, se implantarán más radares en carreteras convencionales, así como nuevos radares de tramo, con el fin de mejorar la seguridad, dado que existen muchas víctimas relacionadas con el exceso de velocidad. Mientras, con los nuevos radares móviles, se sancionará al conductor parándole.

Del mismo modo, Tráfico publicará trimestralmente el importe recaudado con estas medidas y empezará a utilizar drones para el control de tráfico, tanto para la movilidad como para el control de acciones que influyen en la siniestralidad, como el uso del teléfono móvil.

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