Se trata de dispositivos que, colocados en los vehículos, permiten interpretar el entorno e identificar puntos de riesgo.
El Ayuntamiento de Barcelona y la Dirección General de Tráfico han presentado los avances en la implementación del sistema 'Autonomous Ready' de ayuda a la conducción. Se trata de dispositivos incorporados que permiten interpretar el entorno, incluyendo las señales de velocidad o la presencia de peatones, ciclistas y motoristas, para proteger a los usuarios de la carretera más vulnerables.
Colocados en los vehículos, emiten información que facilitará la identificación de puntos de riesgo para la mejora de la infraestructura viaria y la recogida de datos para avanzar en la investigación y el desarrollo del vehículo autónomo.
El sistema, que busca corregir los posibles errores humanos, ya se ha implementado en Barcelona en 170 vehículos de flotas públicas o privadas y en 79 autobuses urbanos. Entre las empresas participantes, se encuentran Seur, Nacex, Logista, Integra, Calidad Pascual y Correos.
A lo largo de 2019, está previsto que se instalen 530 sistemas más en vehículos de flotas y 105 en autobuses para acabar llegando hasta los 5.000 vehículos. El objetivo es incentivar el uso de sistemas de ayuda a la conducción como paso previo a la circulación de vehículos autónomos, formentar la conectividad para prevenir accidentes y evitar congestiones, mejorar la seguridad del usuario, reducir la contaminación y promocionar los vehículos no motorizados.