La experiencia de la APV en la implantación de esta norma ha consistido en la mejora de sus procesos de seguridad en la cadena de suministro, cuyo alcance es la protección de los procesos documentales y físicos del intercambio intermodal de mercancías en el Puerto de Valencia.
La certificación de este sistema de gestión asegura que la APV está comprometida en la protección, tanto del personal, como de sus instalaciones y de la información que intercambia con los componentes de la Comunidad Portuaria.
Esta protección se consigue a través de la incorporación en la gestión ordinaria de las mejores prácticas e instrumentos existentes para cumplir con los estándares normativos exigidos, mientras que el sistema integrado de protección reevalúa los riesgos existentes en relación con las personas, las instalaciones y las propias mercancías, lo que supone un mayor control de cada uno de ellos. Además supone una supervisión constante y facilita su perfeccionamiento.
El enfoque de este sistema de gestión está basado en el riesgo, por lo que se ha llevado a cabo un profundo análisis de la situación del Puerto de Valencia y se han establecido unas iniciativas y objetivos para mejorar situación.
Una ventaja determinante es cómo involucra a todo el personal de la APV, desde la alta dirección hasta los niveles operativos.
Sebastián Naranjo, jefe de Seguridad Operativa de la Autoridad Portuaria de Valencia, ha subrayado que “la norma es un sistema de gestión para coordinar y dar unidad a todas las iniciativas independientes, y así facilitar la gestión de la protección hasta el momento”.
Proceso de implantación en las empresas
Disponer de sistemas de gestión que contemplen la seguridad desde una óptica global y que protejan la continuidad y el desarrollo de la actividad empresarial en todas sus esferas, se traduce en un incremento de la reputación corporativa como manifiesto del compromiso de la compañía por ofrecer un desarrollo de negocio responsable.
Para las empresas de la comunidad portuaria de Valencia representa una oportunidad para seguir incrementando la competitividad de sus servicios mediante una gestión adecuada de la seguridad como indica el elevado número de empresas implicadas en obtener la acreditación de operador económico autorizado y los proyectos de innovación en que están participando.