La planta de Enagás de El Musel empezará a funcionar como almacén de gas

El futuro de la regasificadora, a corto plazo, pasa por convertirse en almacén o en gasinera para buques.

18/02/2017 a las 10:27 h

planta-de-enagas-en-el-musel Las instalaciones se encuentran en un lugar estratégico para operar como centro de almacenamiento.

Enagás prevé iniciar en 2017 las operaciones en su planta regasificadora del puerto de El Musel, que funcionará como almacén de gas para las grandes empresas, según ha indicado el diario La Nueva España.

Además, no descarta que se utilice como centro de repostaje para buques, un sector que crecerá por la utilización del GNL como combustible marino.

Actualmente, existen muchas compañías interesadas en utilizar las instalaciones, que podrían incrementarse, una vez se obtenga la autorización administrativa para abrir las instalaciones. En este sentido, se está trabajando para superar el veto que supuso la sentencia del Supremo, que ilegalizó el complejo por motivos urbanísticos.

El objetivo es completar el proceso en verano de 2017, con el fin de poner en marcha la planta a lo largo del año, aunque con un uso diferente al que estaba previsto, consistente en introducir gas en la red nacional, ya que para ello sería necesario cambiar el plan energético actual y obtener los correspondientes permisos. No obstante, el grupo confía en que "en un plazo razonable" pueda regularizarse la situación.

El futuro a corto plazo de la regasificadora pasa por convertirse en almacén o en gasinera para buques. Las instalaciones, que se construyeron en 2012 con una inversión de 382 millones de euros, se encuentran en un lugar estratégico para operar como centro de almacenamiento y cuentan con dos tanques de gran capacidad por los que se han interesado varias empresas.

Asimismo, el 'bunkering' supondría una inyección económica para las instalaciones portuarias de Gijón, ya que los buques que atracarían en el puerto para abastecerse de combustible, tendrían que pagar las correspondientes tasas portuarias y podrían ser reparados en el propio puerto, cuando fuera necesario.

Todos los usos de esta planta son compatibles, siendo de poca envergadura las obras necesarias para su adaptación. Además, podría ser una una vía de entrada en Europa del gas de esquisto procedente de Estados Unidos y otras zonas.

Por otro lado, Enagás aspira a almacenar gas de Yamal LNG, una compañía rusa que pretendía cerrar un contrato a 20 años con la regasificadora de Gijón, pero lo desvió a Zeebrugge (Belgica) por la falta de permisos.

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