La producción europea de equipos de manutención handling se acerca a los mínimos experimentados durante la crisis

La producción de nuevo equipamiento ha descendido un 5%, mientras que las operaciones de mantenimiento y reparación lo han hecho en un 13%.

16/10/2014 a las 2:04 h

Producción, reparación y mantenimiento de material handling en Europa

El valor económico derivado de la producción de equipos de manutención en Europa ha experimentado en 2013 un descenso del 6,8%, con respecto al año anterior, hasta situarse por debajo de los 56.000 millones de euros, motivado por una baja demanda local y un estancamiento de las exportaciones, según los datos facilitados por la Federación 'European Materials Handling' (FEM).

Concretamente, la producción de nuevo equipamiento ha descendido un 5%, mientras que la cifra de negocio derivada de las operaciones de mantenimiento y reparación ha caído un 13%.

Los 56.000 millones de euros que ha alcanzado la industria en 2013 se sitúa por debajo de las cifras de 2005, y se aproxima a los mínimos experimentados en los últimos ocho años, correspondientes a los 54.000 millones de los años 2009 y 2010, coincidiendo con el comienzo de la crisis económica.

Además, la demanda interna europea en 2013 de equipos de manutención se ha situado en 29.000 millones de euros, lo que representa un 75% de la demanda experimentada en el mismo segmento en 2005.

En cuanto al comercio exterior, las exportaciones se han estacando en 22.900 millones de euros, lo que demuestra, en opinión de la Federación, que los fabricantes están cada vez más cerca de hacer la mayor parte de su negocio fuera de Europa.

Las importaciones han crecido un 6,5% hasta los 4.900 millones de euros, por lo que los competidores externos están ganando así un poco más la cuota de mercado, aunque la balanza comercial es bastante estable y todavía en gran parte positiva, con un saldo positivo de 18.000 millones.

Solicitudes a Bruselas

En este contexto, desde FEM han indicado recientemente al Parlamento Europeo, que los fabricantes de los Estados miembros se encuadran en un mercado externo cada vez más competitivo, por lo que su competitividad es crucial y gran parte de ella proviene de la capacidad para innovar y la inversión que se realice en este sentido.

Por este motivo, entienden que las políticas europeas no deben limitar, sino fomentar dicha capacidad para salvaguardar la producción industrial europea.

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