Madrid duplicará este 2015 el número de estaciones para el suministro de Gas Natural Comprimido 'vehicular', pasando de las seis actuales alas 12 con las que está previsto que estén operativas a final de 2015, distribuidas homogéneamente por el perímetro urbano.
Así lo han indicado este martes 24 de febrero desde el Ayuntamiento, durante la inauguración de una nueva estación de abastecimiento de Gas Natural Fenosa en el polígono industrial de Vicálvaro.
En 2014 se abrieron dos estaciones en la capital de España, a las que se sumarán dos en breve, mientras que en los próximos meses está previsto un nuevo proceso de concesión de suelo para el establecimiento de otras seis.
De esta forma, en 2016, Madrid dispondrá de una red de 12 puntos de suministro de GNC de acceso público cerca de las zonas de demanda y en las proximidades a los principales ejes de acceso a la ciudad.
Durante los últimos tres años, se ha pasado de dos estaciones de suministro de GNC a seis de acceso público, de 10 a 16 puntos de suministro de gas licuado del petróleo (GLP) y de 139 puntos de recarga eléctrica a 175, además, se han instalado dos puntos de suministro de bioetanol.
Actualmente, la flota municipal cuenta con más de 1.250 vehículos pesados de GNC, de los que 19 son grúas municipales y 459 camiones para la recogida de basuras, lo que ha permitido reducir el peso de estas flotas en el conjunto de las emisiones de óxidos de nitrógeno (NO2) de la ciudad del 41,3 % en 2009 al 26,9% en 2013.
Cuarta EESS de Fenosa
La nueva estación de servicio inaugurada este martes supone la cuarta de Gas Natural Fenosa en la ciudad y la sexta en la región, y suministrará GNC a una presión de 200 bares las 24 horas del día durante los 365 días del año, debido a que la misma será de autoservicio.
Actualmente, existen en España 42 estaciones públicas de gas natural vehicular, 27 de las cuales son gestionadas por esta compañía.
El uso del gas natural en automoción reduce en más de un 85% las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) y de partículas en suspensión, y hasta un 3% las de CO2. Además, disminuye la contaminación acústica hasta en un 50% respecto a un motor normal.
Por otro lado, desde el punto de vista económico, puede generar un ahorro de hasta el 30% respecto el gasóleo y del 50 % respecto a la gasolina.