En línea con su nuevo programa 'adVANce', la división de furgonetas de Mercedes-Benz ha invertido 16,5 millones de euros en la 'start-up' Starship Technologies, dedicada al desarrollo de robots de entrega autónomos.
Como resultado de su colaboración, en septiembre de 2016 se presentaba el concepto 'mothership', que combina las ventajas de una furgoneta con las de un robot de este tipo. Se trata de un prototipo con la base de una Sprinter, que funciona como centro de operaciones para cargar y transportar hasta ocho robots.
Hasta ahora, estos robots debían volver hasta el almacén para cargar la mercancía después de cada entrega, pero la introducción de la furgoneta amplía su radio de acción de forma significativa, haciendo innecesaria la construcción de almacenes descentralizados.
La combinación de ambas tecnologías permite ofrecer a los clientes nuevos servicios y desarrollar diferentes modelos de negocio. Al mismo tiempo, el proceso de entrega se vuelve mucho más cómodo y fácil para el cliente final.
La nueva tecnología facilita el proceso de entrega al cliente final.
El objetivo es continuar trabajando en este concepto en los próximos meses, por lo que están preparando el inicio de las pruebas en Europa para posteriormente llevar a cabo otras junto a uno o varios socios logísticos. Está previsto que el lanzamiento en un entorno real se produzca a lo largo de este año.
El fabricante invertirá alrededor de 500 millones de euros en los próximos avances en digitalización, automatización y robótica relacionados con el segmento de las furgonetas, así como en los nuevos conceptos de movilidad, hasta el año 2020.