MSC se ha incorporado a la iniciativa de intercambio de datos 'Freight Logistics Optimization Works', Flow, que ha puesto en marcha la Administración Biden esta misma semana.
Con ella, la Casa Blanca pretende eliminar los cuellos de botella de la cadena de suministro al mejorar el intercambio de información de fletes entre los actores, con el fin de reducir los tiempos de tránsito y reducir los costes.
Además de la naviera helvética también participan en este proyecto otros grandes actores del sector logístico como CMA-CGm, FedEx, C.H. Robinson, Prologis o los puertos de Los Ángeles, Georgia y Long Beach, hasta un total de 18 integrantes de inicio.
Todas estas empresas y entidades trabajarán junto con el Gobierno estadounidense para desarrollar métodos que permitan compartir información en la cadena de suministro de manera más eficiente, con el fin de mejorar la visibilidad y crear una nueva herramienta digital en la que cada empresa pueda compartir datos precisos relacionados con la carga en tiempo real.
MSC considera que la iniciativa de la Administración Biden supone un paso fundamental para construir cadenas de suministro más eficientes, seguras y resilientes.
Este proyecto del Gobierno estadounidense forma parte de un conjunto de medidas con el que se quiere reforzar el suministro de productos al país, tanto a medio, como a corto plazo, con la intención de evitar situaciones como las que se han vivido el año pasado en los puertos californianos, o la escasez en el suministro de ciertos productos, particularmente de componentes electrónicos para la industria automovilística.