Entre sus últimos proyectos, destaca el desarrollo de un pequeño vehículo eléctrico para las entregas en Málaga.
En el marco de un proyecto de investigación para explorar nuevas fórmulas de distribución urbana en las ciudades europeas, Dachser está desarrollando nuevas soluciones modulares para gestionar las entregas de última milla.
Actualmente, el sector logístico se enfrenta múltiples complicaciones en los entornos urbanos, como los atascos, el escaso espacio para aparcar, las restricciones de tráfico por las emisiones o incluso las prohibiciones que se están empezando a aplicar en algunas ciudades, especialmente para los vehículos diésel en ciertos horarios.
El crecimiento de las ciudades y de las áreas metropolitanas, en combinación con los cambios de hábitos de los consumidores y una mayor conciencia de los problemas medioambientales, está generando nuevos desafíos en el ámbito logístico. Además, los operadores deben gestionar un mayor número de entregas de envíos mucho más pequeños para clientes cada vez más exigentes.
Las nuevas soluciones de Dachser, diseñadas para realizar entregas más eficientes y sostenibles en zonas urbanas, pueden ser implementadas a nivel local tras el debido análisis de la topografía, demografía y estructura regulatoria de la región.
Los estudios que están llevado a cabo se centran no solamente en las cadenas de suministro multimodal y la configuración de los procesos, sino también en las entregas en horario de tarde o noche y en el uso de sistemas de conducción innovadores. Todos estos condicionantes han contribuido considerablemente a reducir la huella de carbono.
Proyecto en Málaga
Entre sus últimos proyectos, destaca el desarrollo del 'carrito', que se encuentra localizado en Málaga. Se trata de un pequeño vehículo eléctrico que puede usarse en zonas peatonales y se mueve a una velocidad de 7 km/h, con un radio de giro de 1,65 metros, cuyas baterías pueden recargarse durante la noche.
Otros proyectos actualmente en fase de desarrollo son el uso de bicicletas eléctricas para las entregasen las ciudades alemanas de Stuttgart y Tubinga, que próximamente se testará también en Berlín. Pueden transportar hasta 250 kg de peso y operar en todas las áreas abiertas al tráfico de bicicletas.