Según UGT, la situación de la plantilla de Renfe es "ya prácticamente insostenible" y afecta a las distintas sociedades que componen el grupo, una situación que ya fue denunciada hace un año.
"Ha pasado casi un año desde que alertamos de la urgencia de acometer nuevos ingresos en todos los colectivos". Sin embargo, la empresa ha hecho "caso omiso" a las reivindicaciones de los sindicatos, que "lejos de ser caprichosas", son una "verdadera necesidad" para garantizar la estabilidad del actual empleo, la calidad del servicio que ofrecemos a la ciudadanía y la viabilidad del grupo y el futuro de los trabajadores.
Tras la convocatoria de huelga prevista para el día 22 de junio, el sindicato ha estado en contacto tanto con el presidente del grupo Renfe como con la dirección de RRHH de la empresa. Aunque la necesidad de realizar contrataciones es una realidad, "lo cierto es que a fecha de hoy desde la dirección no existe una apuesta real por el empleo", por lo que, de persistir en su postura, UGT comenzará con un periodo de conflictividad laboral progresiva.
Desde UGT se continuará reivindicando la generación de empleo en todos los grupos profesionales por la vía de la "presión" ya que entiende que la vía de la negociación "no ha dado los frutos que esperábamos". De esta forma, confía que, con movilizaciones y paros, la dirección de la empresa "entre en razón y eviten, no ya la conflictividad, sino la decadencia a la que están condenando al grupo Renfe si no se genera empleo".