La octava edición de WConnecta vuelve a Madrid.
Con la irrupción de la tecnología en el transporte han cambiado muchas cosas. Sin embargo, para José María Sallés, gerente de la Fundación Wtransnet, hay algo que no ha cambiado: la necesidad de estrechar la mano a otra persona.
De esta idea nació WConnecta hace ocho años. En estas ocho ediciones, han pasado por las mesas de ‘speed networking’ de WConnecta 3.500 profesionales, de 30 países europeos distintos, que han llevado a cabo más de 5O mil encuentros rápidos de los que seguro han surgido miles de colaboraciones.
Tras su paso por Alemania en 2017 en la primera edición internacional, WConnecta vuelve a la ciudad en la que comenzó su andadura en 2009. Madrid acogerá, el 26 de octubre, la próxima convocatoria del evento internacional de los profesionales del transporte, con una previsión de 1.000 asistentes.
Organizado por la Fundación Wtransnet en su empeño de llevar a cabo iniciativas para ayudar al transporte, representará una nueva oportunidad para todas las empresas europeas de participar en una jornada de networking única en el sector.
La edición de este año se celebra a continuación de Fruit Attraction, la feria de operadores hortofrutícolas internacionales, con el fin de concentrar dos eventos de interés para el sector en la misma fecha.
Novedades en la Edición 2018
WConnecta sigue fiel a su formato, aunque la novedad de 2018 será el ‘Business Center’’.Un espacio de reunión al que las empresas podrán acceder por la tarde para mantener reuniones de negocio con mayor intensidad.
La ‘Cargo Area’ volverá como espacio abierto durante todo el día para que operadores logísticos y empresas de transporte ofertantes de cargas mantengan reuniones privadas, previamente concertadas, con transportistas interesados en una colaborar con ellos.
Todo ello se completará con la ‘Coffee Area’, un espacio permanente de cafetería donde llevar a cabo encuentros informales.
Para José María Sallés, gerente de la Fundación Wtransnet, hay algo que no ha cambiado: la necesidad de estrechar la mano a otra persona.