Tanto los aeropuertos como las aerolíneas necesitan conocer los próximos pasos para poder realizar una planificación adecuada de sus operaciones.
El sector no ha dejado de reclamar ayudas para las aerolíneas, con el objetivo de garantizar su supervivencia durante los próximos meses.
En Estados Unidos, ciertas compañías han pedido ya permiso a la Administración Federal de Aviación para transportar mercancía en el lugar en que normalmente se sientan los pasajeros.
Aunque la aviación es un sector de carácter internacional, no existe en la actualidad ningún marco jurídico que rija la competencia entre compañías aéreas.
La región de Asia-Pacífico es la que registrará la mayor demanda de profesionales, con 226.000, seguida de Europa, con 95.000.
Se han incrementado los envíos desde Norteamérica a países europeos, especialmente de productos pequeños y económicos.
También se ha reclamado una reforma urgente de la legislación que gobierna el Cielo Único Europeo, porque no es aceptable que sólo se vayan a alcanzar la mitad de los objetivos previstos en eficiencia.
La empresa ha señalado que Aer Lingus seguirá operando como aerolínea independiente, tal y como sucede con Iberia, British o Vueling, y se uniría a la alianza One Wolrld.
Tras la negativa del Consejo de Administración de Aer Lingus de vender la empresa a 2,30 y 2,40 euros por acción, el grupo IAG lanza una oferta mejorada hasta los 2,55 euros por acción.
Los Presupuestos para 2015 del gobierno luso señalan que la privatización de la aerolínea "debería producirse" este 2014, aunque aún no se conoce la decisión a adoptar por parte del Ejecutivo.