Los transportistas autónomos denuncian que muchas furgonetas dedicadas en teoría a mercancías propias o servicios particulares "están realizando transportes a terceros con toda impunidad".
Las furgonetas de transporte utilizadas para servicios públicos deben estar en posesión de la correspondiente autorización y sujetas al cumplimiento de diversos requisitos, como haber superado la ITV.
El sector ya no solamente debe enfrentarse a la renovación de su flota, sino que debe decidir cuál es el mejor vehículo para cumplir con lo exigido, sin saber qué evolución tendrán los nuevos tipos de propulsión.
Ante la previsible subida de los impuestos sobre el gasóleo, los transportistas ligeros quieren que se elimine el agravio comparativo que supone no poder contar con un combustible profesional.
Y que se eviten especialmente los criterios contradictorios que se generan dependiendo del distrito donde se soliciten
Desde ATA, solicitarán al consistorio madrileño que confirme la situación en la que dejan estas nuevas medidas al transporte de mercancías y la distribución.
El transporte de Madrid pide al Ayuntamiento de la ciudad que amplíe los horarios de carga y descarga y agilice la concesión de permisos para acceder a zonas restringidas en la nueva Ordenanza de Movilidad.
Desde ATA, insisten en que es necesaria la presencia del Comité Madrileño de Transporte en la negociación, dado que las medidas demasiado restrictivas pueden provocar el abandono del comercio en la zona.
Desde ATA alertan de los peligros que supone para el desarrollo de la actividad comercial en los centros urbanos la aplicación de nuevas normas de manera descoordinada.
Desde la Asociación de Transportistas Autónomos, recuerdan que el sistema se estableció para simplificar y facilitar al transportista la fiscalidad.