El objetivo es que esta nueva infraestructura pueda estar lo antes posible a disposición del conjunto de las empresas españolas, dado su carácter estratégico para la actividad empresarial y comercial.
El objetivo es generar un debate sobre los parámetros técnicos, los objetivos estratégicos y el enfoque de desarrollo comercial de este área, cuya ejecución comenzará en 2022.
Navarro, que renueva así su cargo al frente de la CEV, también ha recibido el apoyo de la Asamblea a la lista con los 100 vocales propuestos para la Junta Directiva.
Los empresarios valencianos defienden el papel económmico fundamental que tendrá la ampliación norte del puerto de Valencia.
Desde FVET, consideran que es preciso garantizar el cumplimiento de ciertos mecanismos legales, como la cláusula de revisión del precio del combustible, los plazos de pago o el pago de las indemnizaciones por paralizaciones.
CEV y Propeller Valencia también han detectado la necesidad de elaborar un estudio independiente sobre el impacto que tendrá la ampliación norte del puerto valenciano para la economía.
El empresario alicantino es en la actualidad administrador de Metromedia Inversiones y presidente de Eco3Multimedia.
Esta conexión ferroviaria enlazaría el puerto de Bilbao con el norte de Europa, el de Castellón con los mercados africanos y el de Valencia con los países asiáticos.
En el acto se analizarán las oportunidades y fortalezas que ofrecen los puertos valencianos para la economía madrileña.
Desde la Autoridad Portuaria, han defendido la necesidad de mejorar el Corredor Cántabro-Mediterráneo para disponer de conexiones óptimas con el puerto de Bilbao y la cornisa cantábrica.
Desde el Ministerio de Fomento se señala continuamente que el Corredor Mediterráneo es una prioridad para el Gobierno.
En el primer trimestre de 2017, la cifra de negocios del sector ha crecido un 7,4% en la Comunidad Valenciana y un 6,6% en toda España.
Según los planes de la Administración, la mayor parte de las actuaciones a acometer estarían finalizadas en 2018.
Los principales agentes y sectores afectados de la región valenciana estiman que el coste total por cada día de huelga completo asciende a cinco millones de euros.
El presidente de la CEV, Salvador Navarro, apuntaba en marzo que el Ejercito debía intervenir ante una huelga en los puertos.
La conexión ha perdido 18 trenes a la semana en los últimos cinco años en favor del transporte por carretera y otras rutas ferroviarias alternativas.
La cifra de negocios en el sector crece por encima de la media nacional en los últimos meses.
El proyecto dejaría fuera a Asturias, que necesitaría adaptar su línea al ancho internacional para poder conectarse con esta infraestructura.
El conflicto ha supuesto una caída del 23% de la productividad media habitual del enclave y el desvío de buques a otros puertos.
Desde la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) aseguran que una empresa privada está dispuesta a operar cuatro o cinco trenes semanales.