El 2021 ha sido el año de la consolidación del sector, manteniéndose la tendencia alcista durante los primeros meses del año, aunque sin crecimientos tan elevados.
Entre la población con estudios superiores compra un 85,6%, pero entre la que tiene estudios secundarios de primera etapa o un nivel inferior, lo hace menos del 60%.
En una actividad tan madura y con tanta competencia, con márgenes tan estrechos, es fundamental tener en cuenta la rentabilidad, lo que conduce necesariamente a la optimización de procesos.
Según un estudio de la plataforma Mirakl, tras la pandemia, la tendencia es que los consumidores confíen cada vez más en el ecomerce.
El sistema integra una secuencia de bandejas, con capacidad para procesar hasta 10. 000 unidades por hora, de tamaño estándar 650 x 450 mm.
Se dará respuesta a cuestiones como la cantidad de envíos que esperan gestionar las empresas de reparto de cara al Black Friday o el incremento de los volúmenes previsto.
Uno de los ejes vertebrales de las estrategias logísticas de las empresas del sector ha sido la puesta del consumidor en el centro.
Puede ser utilizada por cualquier negocio que envíe hasta 5.000 paquetes al año y permite realizar un seguimiento de las compras, que se entregan en mano mediante firma electrónica.
En el estudio, desarrollado por la Universidad Complutense y la Universidad Autónoma de Madrid, se ha puesto el foco en la proximidad digital.
Un 47% señala como motivación principal el poder tocar y ver de cerca los artículos, mientras un 34% valora poder disfrutar de nuevo de la experiencia de compra.
Gracias a la incorporación de procesos digitalizados, los datos de productos y clientes son más accesibles, por lo que se trabaja de forma más eficiente.
El hecho de que el producto no vaya a llegar en un plazo corto de tiempo es el principal motivo de abandono en la pasarela de pago.
Para los vendedores, resulta muy importante saber en qué país los rechazan o dónde y bajo qué circunstancias los aceptan.
País Vasco, Galicia y Asturias son las regiones que mejor se han adaptado a las compras 'on-line', seguidas de Comunidad Valenciana y Madrid.
Permite conocer la ubicación y la actividad en tiempo real de cada trabajador desplazado para reducir tiempos de espera en la última milla.
El buen trato del repartidor forma parte de la experiencia de compra del usuario, que tienen muy en cuenta el uso de de los EPIs.
La seguridad de los pagos digitales ha posicionado al e-commerce en un lugar preferente tanto para consumidores como para comercios.
Como consecuencia del empeoramiento de la situación económica por el Covid-19, los españoles son ahora mucho más selectivos a la hora de comprar.
En los últimos 12 meses, el porcentaje de compradores 'on-line' ha alcanzado el 62,6%, frente al 58% del año anterior.
Cualquier 'smartphone' puede convertirse en un potente escáner de códigos de barras, textos e imágenes, reduciendo el tiempo empleado en el recuento y la gestión del inventario.