Los fletes marítimos internacionales se enfrentan a unos próximos meses complejos, con cierta presión sobre las tarifas y con una demanda que registra un comportamiento un tanto errático.
Los fletes tienden a estabilizarse en el segundo trimestre de 2023 y con posibles nuevas reducciones en lo que queda de año, según el análisis de Transport Intelligence.
Los fletes marítimos internacionales han repuntado en la última semana impulsados por los incrementos registrados en las líneas entre Asia y la costa oeste de los Estados Unidos, mientras el resto permanece estable y con cierta tendencia a la baja.
Los fletes en las principales líneas marítimas transoceánicas siguen a la baja en un contexto de debilidad de la demanda y de espera a ver la evolución en el consumo de cara a la segunda mitad de año.
Los fletes de contenedores desde Valencia han retrocedido en 2022, tras una primera mitad de año al alza y un segundo semestre marcado por la debilidad en la demanda y una recuperación en la normalidad de los flujos.
Tras un período de estabilización, los fletes marítimos vuelven a retroceder un 5% en los siete últimos días, en un contexto de lenta recuperación de la demanda de cara a la temporada estival.
Los fletes de exportación desde Valencia acumulan ocho meses seguidos a la baja, para colocarse en niveles de abril de 2021, dentro de un contexto de prolongada incertidumbre.
Los fletes marítimos se han estabilizado durante la última semana, en un contexto en el que las navieras buscan controlar la capacidad disponible, mientras se suceden las renegociaciones de contratos.
Durante la última semana, los fletes marítimos han cambiado de tendencia y han crecido significativamente, impulsados por los incrementos de las tarifas de los servicios que enlazan Asia con América del norte.
La heterogénea evolución de los fletes en la última semana podría indicar que las políticas de reducción de oferta están logrando estabilizar los precios a la espera de ver qué pasa con la demanda en la segunda mitad de 2023.
Los fletes marítimos han evolucionado de manera heterogénea en la última semana en función de cada una de las principales rutas internacionales, mientras las navieras siguen buscando equilibrar la oferta a la demanda.
El último análisis de Frieghtos apunta que en los últimos días de marzo se ha registrado un suave descenso para los fletes en un contexto de debilidad de la demanda.
Drewry ya anticipó que las tarifas de los contratos este año caerían al menos un 50% anual, y que los cargadores podrían obtener mejores términos y condiciones.
La evolución de los fletes en la última semana indica que está a punto de alcanzarse el punto de equilibrio entre oferta y demanda, especialmente en las rutas que enlazan el continente asiático con el norte de Europa.
Las previsiones de posibles aumentos de la demanda en la segunda mitad de 2023 podrían poner fin a los prolongados descensos que se vienen registrando en los fletes marítimos internacionales.
Los fletes mantienen una semana más su tendencia bajista de los últimos meses a la espera de una próxima reactivación de la demanda que podría darse de cara a la temporada estival.
Los fletes marítimos internacionales han registrado un brusco descenso de un 10% en la última semana, en un contexto de pugna entre las navieras por una menor demanda.
Esta evolución del indicador refleja el retroceso en los intercambios comerciales mundiales, pese a que, al mismo tiempo, se observa una mejora evidente de la congestión portuaria a escala global.
Los fletes marítimos se estabilizan en un contexto de recuperación de los niveles de utilización de la flota y de fiabilidad en los servicios, circunstancias que mejoran la fluidez en las cadenas de suministro internacionales.
La caída de los fletes se acentúa mientras persisten dudas sobre la evolución de la economía antes del verano y las navieras maniobran para evitar que las nuevas entregas de buques sobrecarguen la oferta de transporte y acentúen las caídas en los precios.