El mercado laboral de la gente de mar se ha vuelto particularmente complejo, con dificultades importantes para la contratación y retención, así como en lo referente a costes.
Desde el sindicato se afirma que Armas utiliza estudiantes en prácticas "como mano de obra barata" y la naviera afirma que no son un "trabajo encubierto".
Desde el Registro de Liberia, animan a otros a proteger también a los trabajadores mediante las correspondientes autorizaciones, ampliaciones, dispensas y certificados.