Ante las evidencias de los riesgos de salud existentes para los conductores profesionales, el sector demanda unos unos coeficientes reductores que rebajen la edad de jubilación de los chóferes.
El plan para 2018 incluye 190 plazas destinadas a la jubilación parcial al 75% a las que se accederá por orden de antigüedad y, posteriormente, por edad.
Diversos estudios ponen de manifiesto que con la edad se incrementa la siniestralidad de un colectivo laboral sometido a unas duras condiciones de trabajo.
El objetivo de la empresa pública, que ya ha iniciado los contactos con las organizaciones sindicales, es sustituir estas bajas con 700 nuevas incorporaciones.