Espo ha valorado los proyectos para potenciar la biodiversidad y la transición energética, así como su apuesta por la electrificación de muelles y los combustibles de cero emisiones.
El objetivo es que los puertos estén preparados para suministrar energía eléctrica, preferiblemente renovable, a los barcos portacontenedores, de pasaje, cruceros y ferries antes del 2030.
Los automóviles, uno de los tráficos con mayor valor añadido en el puerto de Barcelona, han experimentado un crecimiento del 33,7%, con 790.000 unidades.
El Fòrum Telemàtic ha sido un instrumento de mejora que ha facilitado la puesta en servicio de herramientas tecnológicas para mejorar la competitividad de las cadenas logísticas que pasan por el puerto.
La Autoridad Portuaria de Barcelona está negociando esta medida con las empresas de cruceros para limitar el consumo de agua como consecuencia de la sequía en la región.