España cuenta con unos 900 radares en total, mientras que en Francia existen ya 4.000 instalados en las carreteras y en Reino Unido, 7.200.
La normativa incluye una reforma del modelo de formación vial, la implantación de nuevos radares y la revisión del carnet por puntos.
En Normandía, la gestión de las sanciones seguirá en manos de la policía pero los vehículos y los radares serán de una empresa privada.
La Guardia Civil intensificará el control al uso del cinturón de seguridad hasta el próximo 17 de septiembre.
El 60% de las 255 cámaras que se han instalado están ubicadas en vías convencionales, mientras que el 40% están en vías de alta ocupación.
Se han registrado 4.369.603 denuncias por exceso de velocidad, que han generado una recaudación de 164 millones de euros.
El nuevo sistema diferencia entre tipos de vehículo, abarca ocho carriles y multa hasta los adelantamientos peligrosos.
Se incrementan en un 12% los tramos nuevos, con respecto a los vigilados desde el tercer trimestre de 2015.
Tráfico también instalará 70 cámaras capaces de detectar el uso de móvil o del cinturón de seguridad.
Se controlarán con radares móviles un total de 25.172 km de carreteras convencionales divididos en 1.314 tramos.