Pese al descenso acumulado en 2020, durante la etapa más dura del confinamiento se ha incrementado la siniestralidad vial en vehículos pesados.
El sindicato estima que cada mes doce conductores profesionales pierden la vida en la carretera y pide medidas para mejorar la seguridad del colectivo.
El año pasado ha descendido el número de fallecidos en accidentes con furgonetas, mientras ha crecido el de muertos en percances con camiones.
Un total de 15 navíos de carga sufrieron siniestros a lo largo de 2018, principalmente naufragios, con los incendios como la causa de las mayores pérdidas que se producen a bordo en estas situaciones.
Tres de los tramos con mayor siniestralidad para los camiones están localizados en Castilla-León y otros dos en Castilla-La Mancha y en la Comunidad Valenciana.
España cuenta con unos 900 radares en total, mientras que en Francia existen ya 4.000 instalados en las carreteras y en Reino Unido, 7.200.
Detrás de un fallo humano, se encuentran a menudo causas como el exceso de horas de trabajo, turnos inadecuados, falta de descansos o un ritmo demasiado elevado.
La Comisión Europea había prometido introducir estándares respecto al ángulo de visión necesario en los camiones en 2028, pero podría adaptar el plan a todos los vehículos y adelantar su aplicación.
Los cinco primeros meses de 2017 dejan 41 víctimas mortales, 137 heridos graves y 14.750 heridos leves en accidentes que han tenido lugar en horas de trabajo.
Más de 2.000 personas han firmado una petición en change.org para que el Gobierno retire un anuncio que criminaliza la profesión.