En una comisión con el ayuntamiento, se revisará la propuesta y se abordará el número de cruceristas que puede recibir la ciudad y la necesidad de evitar emisiones contaminantes.
El puerto confía en licitar las obras antes del verano de 2018, preferiblemente en la zona donde se ubica la actual concesión de Unión Naval, con el fin de que estén terminadas a finales de 2019.
Unión Naval Valencia no ha podido acceder a nuevos contratos en estas circunstancias, por ello, ha decidido suspender la actividad de construcción naval tras la finalización de los contratos en vigor.
El grupo marítimo valenciano denuncia la negativa del comisario Joaquín Almunia a admitir alternativas para un nuevo régimen fiscal para los astilleros españoles.