La carga de trabajo en los astilleros ha aumentado notablemente en los últimos años.
La mejora de la situación económica en los últimos años ha supuesto un nuevo impulso para la construcción naval, tal y como se ha puesto de manifiesto en el último Encuentro con la Mar del Clúster Marítimo Español, dedicado a la financiación marítima.
La carga de trabajo actual de los astilleros privados ha aumentado notablemente, del mismo modo que la de los públicos. Así, Navantia, que acaba de entregar un buque Suezmax al Grupo Ibaizábal, ya tiene previstas otras entregas, así como algunos macropedidos pendientes de concretar.
En el evento, se han mostrado los instrumentos del Consejo Marítimo Internacional y del Báltico, Bimco, para operaciones bilaterales sencillas. Se trata de guías que recogen las principales particularidades a tener en cuenta en las operaciones de financiaciónde buques, aunque no sustituyen a las 'term sheets'.
También se ha presentado el Barecon 2017, una actualización de este sistema que incluye un nuevo formulario del contrato de arrendamiento, que establece la obligación del arrendador de entregar el buque en estado de navegabilidad e incluye cláusulas relacionadas con la inspección del buque a su entrega.
Además, se puede adecuar su aplicación a estructuras de financiación para embarcaciones de nueva construcción, vía contrato de arrendamiento o 'lease finance'. Por otro lado, se han explicado las formas de financiación que tienen a su alcance entidades públicas como el Instituto Español de Oceanografía, IEO.
En el sector privado, los armadores pueden recurrir a financiación externa y a mecanismos como el 'tax lease', pero en el sector público se cuenta con un presupuesto limitativo o estimativo. El del IEO es limitativo, aunque cuenta con las ayudas Feder o ICTS, que debe aprobar la Comisión Europea.
Ventas de buques y financiación bancaria
Otro de los aspectos que se ha tratado ha sido el movimiento que impulsa el Comité Marítimo Internacional para unificar el derecho marítimo internacional en cuanto a las ventas de buques en subasta pública.
Se está trabajando en un texto homogéneo de aplicación a los países que se acojan, que prevé el otorgamiento de un certificado de venta judicial. Este documento aporta seguridad a la operación, dejando al buque libre de cargas.
Por último, se ha aludido a la financiación bancaria, dado que con la crisis se ha reducido el número de entidades y las existentes se ven obligadas a pedir gran cantidad de información a las empresas para otorgar créditos. No obstante, priorizan las inversiones en el ámbito energético y tecnológico.