La gestión de envases en España está experimentando en los primeros ocho meses de 2025 una transformación más profunda que en la última década. La nueva normativa que amplía la Responsabilidad Ampliada del Productor ha llevado a que todas las empresas que pongan en el mercado envases comerciales estén ahora obligadas por ley a financiar y garantizar su correcta gestión y reciclaje.
Este cambio redefine el modelo de circularidad y multiplica las responsabilidades de las compañías. Por primera vez, las empresas deben hacerse cargo no solo de los envases domésticos que llegan al consumidor final, sino también de los embalajes y soportes que sostienen la actividad económica y no están disponibles para su compra por parte del consumidor, de modo que el residuo se genera en el comercio.
Entran en juego, por tanto, los embalajes que el consumidor no adquiere, pero que resultan esenciales para sectores como distribución, hostelería o restauración. En este contexto, 9.000 empresas ya confían en Ecoembes Comerciales, una división creada por Ecoembes cuya misión es acompañar a las compañías en esta transición.
Para muchas compañías, la medida supone una ampliación de sus obligaciones actuales, puesto que ya gestionaban sus envases domésticos y ahora integran también los envases comerciales en sus planes de circularidad. Sin embargo, otras que no ponen envases domésticos en el mercado deben familiarizarse por primera vez con la RAP y adaptarse a un modelo más exigente en plazos, trámites y reporting.
Cumplir con la nueva obligación requiere que las empresas sigan tres pasos clave. En primer lugar, deben adherirse a un Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor para garantizar la correcta gestión de sus envases y asumir su financiación.
También deberán declarar anualmente al SCRAP los envases que ponen en el mercado, ya que solo abonan la gestión de los que realmente introducen. Por último, es necesario inscribirse en el Registro de Productores de Producto del MITERD y reportar allí cada año la cantidad y tipología de envases, sin coste asociado.
Este nuevo escenario supone reorganizar procedimientos internos y adaptar modelos de reporte, pero también abre la puerta a convertir la circularidad en una ventaja competitiva para aquellas que logren adelantarse. Así, el programa de Ecoembes Comerciales, sin cuota de adhesión, ha sido diseñado para simplificar la gestión y garantizar el cumplimiento normativo.
La solución abarca tanto las gestiones de los envases domésticos como las de los comerciales e industriales, facilitando el proceso al contar con un único interlocutor. La organización cuenta con una amplia oferta de servicios para la circularidad de los envases, incluyendo herramientas digitales que responden a estas nuevas necesidades, así como asesoramiento experto y soluciones personalizadas.
Solo en el último año, ha realizado más de 4.300 trámites en nombre de sus clientes, permitiendo un ahorro medio estimado de 10 horas de trabajo por empresa. Ahora, pone a disposición de ellas su experiencia, innovación y capacidad de anticipación, permitiéndoles cumplir la normativa, mejorar su reputación y contribuir a un futuro más sostenible.
