Teniendo en cuenta el aumento del servicio de la cesta de compra 'on-line' y el impacto del delivery en el día a día de los ciudadanos, el embalaje se está convirtiendo en un elemento crítico para que las empresas de restauración alcancen sus objetivos de reducción de la huella de carbono y contribuyan a reducir el desperdicio alimentario.
Se trata de un paso clave para cumplir con lo estipulado en la Ley de prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentario, que entró en vigor el pasado 3 de abril, y poder adaptarse a las nuevas normas comunitarias sobre envases y residuos. Así lo explican desde Embalajes Raja, que ha aumentado las ventas de soluciones de alimentación un 12,1% en el último año en España, y el número de clientes en este sector en un 17%.
La compañía está potenciando su gama de alimentación para dar respuesta a estas nuevas necesidades y, a la vez, cumplir su objetivo de seguir creciendo a doble dígito. En este sentido, ha aumentado sus referencias ecoresponsables para el sector hasta alcanzar un 96% de la línea de productos.
Hasta la fecha estaban fabricados con materiales como el plástico o el aluminio, pero su apuesta actual pasa por el uso de envases biodegradables, compostables y reutilizables, que responden además a recientes normativas como el Reglamento de la UE 2025/40, sobre los envases y residuos de estos.
En su catálogo, por cierto, destacan productos como el papel aislante térmico Recycold, que garantiza la integridad de los productos, respetando la cadena de frío de 10 a 48 horas con el uso de acumuladores de frío flexible en papel kraft, con una temperatura de congelación de aproximadamente -18ºC.
Su intención es seguir innovando en esta gama de envases y embalajes para el sector de la alimentación, pero sin dejar a un lado la sostenibilidad, que es actualmente uno de los principales valores de la compañía.
