El Gobierno cree que la autopista del mar entre los puertos de Vigo y Nantes-Saint Nazaire, podría empezar a funcionar este año si la Comisión Europea autoriza las ayudas de Estado que son necesarias para su lanzamiento y puesta en marcha, y confirma que en principio será la naviera Suardíaz la que opere este recorrido.
Así lo señala en respuesta a la diputada socialista Carmela Silva, quien se interesó por el futuro de esta línea marítima. En la respuesta, el Ejecutivo recuerda que el proyecto de ayuda para la puesta en marcha y explotación de la autopista del mar entre Algeciras y Vigo y los puertos de Le Havre y Nantes-Saint Nazaire fue comunicado a la CE en julio de 2010.
Sin embargo, al perder el socio mayoritario del proyecto el contrato de explotación, el procedimiento fue "dejado en suspenso" ese mismo año. En 2012 se lanzó un nuevo concurso que ganó la naviera Suardíaz, y las negociaciones entre España y Francia se encuentran ya "en una fase avanzada" para que la compañía se acoja a las condiciones de la autopista.
Además, ya el año pasado se dio cumplimiento al requisito de que el proyecto se presentara al Programa Marco Polo II, imprescindible para obtener la autorización de ayudas estatales por parte del Ejecutivo comunitario, y actualmente la CE está evaluando las propuestas.
"La fecha prevista para la puesta en servicio de esta autopista del mar viene condicionada por la autorización de la Comisión Europea de la obtención de ayudas estatales. En caso de obtenerse ésta en un plazo relativamente breve, se prevé la puesta en funcionamiento durante el año 2014", apostilla el Gobierno.
El alcance de esta línea marítima se mantendrá en los mismos términos que ya se habían presentado, por lo que su cabecera estará en el puerto de Vigo para reforzar las conexiones con Nantes. En función de la evolución real de la demanda, la línea podría extenderse a Le Havre y Algeciras.
El actual tráfico de carga rodada entre Vigo y Nantes, que ya opera Suardíaz, pero sin subvenciones, se fundamenta en el transporte de coches sin matricular producidos en la factoría viguesa de Peugeot-Citroën con destino a Francia, que nunca se ha realizado por carretera, pues utilizó siempre el modo marítimo.