Los transportistas deben aumentar sus precauciones en invierno

En caso de condiciones invernales adversas, la elección de un neumático adecuado es fundamental para garantizar la seguridad en la carretera.

14/02/2016 a las 21:28 h
Los transportistas deben aumentar sus precauciones en invierno

La elección de un neumático adecuado y tener en cuenta las condiciones climatológicas son dos aspectos fundamentales para garantizar la seguridad en la carretera. En caso de condiciones invernales adversas, el frío, la nieve y la lluvia suponen el mayor reto para los neumáticos, dado que pueden ralentizar o detener el tráfico, teniendo como consecuencia una penalización económica por los retrasos o, en los peores casos, por la pérdida del vehículo.

En España no hay normativa general sobre neumáticos de invierno, a pesar de que sí se establece como obligatorio el uso de cadenas o los neumáticos especiales cuando las señales de tráfico así lo establecen.

La Dirección General de Tráfico establece un código de colores en las carreteras para determinar las restricciones y limitaciones a la circulación para cada tipo de vehículo, en función de las condiciones de la vía y el estado del tráfico. En ese sentido, la DGT ha establecido los requisitos que deben cumplir los vehículos pesados para que puedan circular por las zonas de máximo nivel.

Así, cuando el nivel rojo o amarillo de precaución persista durante más de dos días consecutivos, los vehículos no deben tener una masa máxima adminisible superior a los 7.500 kg y deben utilizar cadenas o neumáticos especiales de invierno. Asimismo, deben de estar geoposicionados durante su circulación a la aplicación correspondiente de DGT y circular solo en horario diurno.

En este contexto, Continental ha desarrollado sus neumáticos Scandinavia, capaces de circular en condiciones de nieve y heladas de una manera segura.