El Gobierno alemán ha autorizado la entrada de Cosco en el capital de la terminal de contenedores de Tollerort en el puerto de Hamburgo.
Las autoridades alemanas permitirán que el conglomerado chino controle menos de un 25% de la instalación portuaria hanseática con la intención de garantizar la viabilidad y los empleos que genera la instalación portuaria de Hamburgo.
Los responsables portuarios defienden que la entrada de Cosco en el accionariado de la terminal no condiciona su propiedad, dado que la propia ciudad de Hamburgo seguirá como accionista principal de la terminalista.
Sin embargo, con la llegada de Cosco la instalación se convertirá en un importante hub para el tráfico de contenedores con China.
Además, la terminal también se beneficiará de la incorporación del conocimiento que tiene el grupo naviero asiático del mercado chino, aunque, al mismo tiempo, la instalación seguirá abierta al tráfico de contenedores de otras navieras, dado que la tecnología que se utiliza y las ventas permanecerán en manos de la terminalista.
En su comunicado, el puerto de Hamburgo asegura que ni la propia instalación portuaria alemana, ni la terminal han sido vendidos a China, al tiempo que resalta las diferencias existentes en materia de derechos humanos.
HHLA, propietaria de la terminal, y Shipping Ports Limited cerraron un acuerdo en septiembre del año pasado para la adquisición de un 35% del capital de la instalación del puerto de Hamburgo que debía someterse al control gubernativo germano. Ante la tardanza en la decisión administrativa, ambas compañías decidieron extender su acuerdo hasta finales de este mes de octubre. La decisión del Gobierno alemán llega sobre la campana.