España ha vuelto a ser elegida miembro del Consejo de la OMI tras las elecciones han tenido lugar la semana pasada en el seno de la Asamblea General de la organización internacional.
Una vez pasa a formar parte del Consejo, España puede presentar la candidatura a la presidencia del Consejo del actual presidente del Consejo y Representante Permanente Alterno de España ante la Organización, Víctor Jiménez, que ya ejerce este cargo desde 2021.
A juicio de la deelgación española, la permanencia del país en este órgano de gestión de la OMI permitirá que España continúe aportando su visión para construir y fomentar un transporte marítimo sostenible, ágil y resiliente durante el bienio 2026-2027, que adopte tecnologías verdes y priorice la transición energética, la digitalización y una mayor cooperación internacional.
De igual modo, Transportes estima que de este modo, España continuará siendo un agente activo en el desarrollo de políticas que refuercen la seguridad del transporte marítimo, mejoren las condiciones laborales de la gente de mar, reduzcan la contaminación procedente de los buques y avancen hacia un futuro de energías limpias y bajas emisiones, al tiempo que se impulsa la digitalización y se revitaliza la cooperación multilateral en un momento lleno de incertidumbres en el que el transporte marítimo sigue siendo la base para garantizar el comercio mundial, dado que más del 80% del transporte de mercancías se realiza por mar.
Para España es fundamental mantenerse en la primera línea en un momento de grandes debates, como son el desarrollo de las estrategias de descarbonización del transporte marítimo a nivel internacional, la protección de los océanos o la navegación autónoma, según los responsables del Ministerio.
En los comicios celebrados la senana pasada, se ha elegido a los cuarenta miembros que formarán el órgano ejecutivo de la Organización durante los próximos dos años. Nuestro país se integra en la categoría B, que agrupa a los diez países con mayores intereses en el comercio internacional. Desde el año 1973, España forma parte del Consejo de la OMI y, desde 2001, mantiene su posición en la categoría B.
El Consejo se compone también de una categoría A que integra a los diez países con más intereses en la provisión de servicios marítimos internacionales, y una categoría C, que incluye a veinte países por representación geográfica.