Amazon ha hecho de las entregas ultrarrápidas su santo y seña, una rasgo identificativo que se ha convertido en un estándar a seguir en el complejo segmento del comercio electrónico.
Fiel a su apuesta por la velocidad, la plataforma norteamericana ha decidido llevarla un paso más allá y ha anunciado esta misma semana que tiene la intención de extender su servicio de entrega el mismo día del pedido en áreas rurales de los Estados Unidos.
Cubiertas con garantías las principales áreas urbanas del país, Amazon se lanza a por los amplios y despoblados espacios rurales, cuya cobertura en estas condiciones de urgencia supone un reto logístico de gran calado.
En particular, la multinacional tiene la intención de ofrecer estas entregas el mismo día del pedido en más de cuatro mil pequeñas poblaciones, aldeas y comunidades rurales de los Estados Unidos antes de finales de 2025.
La compañía se apoya para la extensión de este servicio en una iniciativa desarrollada en un millar de pueblos estadounidenses con entregas en el mismo día y que ha sido un éxito, según sus estimaciones.
Para conseguirlo, la plataforma invertirá 4.000 millones de euros hasta finales de 2026, transformará sus estaciones logísticas en estas zonas para convertirlas en establecimientos híbridos que agrupuarán diversos servicios y utilizará algoritmos avanzados para predecir la demanda y tener inventario de aquellos productos más demandados y que pueden servirse de inmediato.
Lo cierto es que la conveniencia, la comodidad y la rapidez en las entregas siguen siendo factores que los consumidores del canal on-line valoran especialmente y que Amazon parece decidida a explotar.