El Comité Nacional del Transporte por Carretera ha dirigido hace unas semanas una carta a la Federación Española de Municipios y Provincias en la que reclama homogeneidad en la aplicación de los Planes de Movilidad Urbana Sostenible y las Federación Española de Municipios y Provincias.
De manera particular, el órgano consultivo se muestra preocupado por los efectos adversos que esta dispersión normativa podría generar para el sector del transporte de mercancías y, al mismo tiempo, como refiere Froet, ha expresado su preocupación por la posible existencia de hasta 394 normativas diferentes, una por cada municipio de más de 20.000 habitantes, lo que dificultaría enormemente la operativa de los transportistas.
Así mismo, el Comité advierte de que, al no existir criterios unificados, cada ayuntamiento podría establecer restricciones distintas en horarios, tipos de vehículos o dimensiones, lo que podría generar un "caos logístico" para las empresas que operan a nivel nacional.
Dada la situación, el Comité ha solicitado a la Federación Española de Municipios y Provincias que promueva directrices comunes para garantizar que las Zonas de Bajas Emisiones y los Planes de Movilidad Urbana Sostenible sean "mínimamente restrictivas" con el transporte de mercancías, dada su consideración como un "servicio público esencial".
