Astic ha celebrado esta semana, coincidiendo con su 65 aniversario, su asamblea anual en la localidad segoviana de La Granja de San Ildefonso, en la que se pone sobre el papel la situación de la asociación, se analiza su evolución en el último ejercicio y se debaten los asuntos que más preocupan a los empresarios del transporte internacional.
Tres de ellos son los que desvelan a las empresas: el aumento de los costes, la escasez de conductores y una posible reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales.
Escenario de costes al alza
En relación con los incrementos de los costes, las empresas de transporte en general, y las intenacional en particular, se vienen enfrentando desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania fundamentalmente a un aumento de algunos de sus principales costes como los precios de camiones y recambios y, de manera especial, los del combustible, aunque estén indexados.
De igual modo, los empresarios del transporte internacional ya ven en el horizonte el impacto que tendrá en su sector el ETS2 a partir de 2027, por lo que piden que los fondos que se recauden le reviertan, dado que es un sector especialmente afectado por el proceso de transición energética que plantea la Unión Europea.
Según las cuentas de Astic, el ETS2 implicará un sobrecoste anual estimado entre 875.000 y 1,2 millones de euros para una empresa con cien vehículos. Esta carga recaerá sobre el combustible, con un sobreprecio previsto de entre diez y veinte céntimos de euros por litro.
Esto dibuja un escenario que hace que los márgenes se compriman, especialmente después del escenario favorable para el sector que dibujaron los acuerdos con el Gobierno de 2021 y la etapa posterior, y que la rentabilidad de las empresas baje, sin que, a su vez, haya aumentado la actividad en el mismo grado que han crecido los costes.
Falta de conductores
También en relación, en parte al menos, con este mismo asunto de la rentabilidad empresarial se sitúa la escasez de conductores, que tiene la doble vertiente de que aumenta los costes laborales a través de incrementos salariales para la contratación de los pocos profesionales disponibles o para traerlos de fuera de la Unión, y de que impide mejoras de la productividad de las empresas.
En este ámbito, Astic reclama más facilidad en los trámites necesarios para contratar y legalizar la situación de los chóferes procedentes de terceros países de la Unión Europea, que actualmente suele ser, según sus cálculos, de un año.
La asociación de transporte internacional estima que España necesita 30.000 conductores profesionales y podría alcanzar un déficit de 116.000 en apenas tres años.
Sin embargo, llama poderosamente la atención la falta de un programa integral a nivel de sector para intentar solucionar un problema que se viene parcheando. Tal vez, la cuestión es que no solo faltan profesionales en el transporte (nacional y europeo, incluso a nivel de todos los países desarrollados), sino que la situación es común a todos los sectores de actividad de la economía española.
Jornada semanal de 37,5 horas
Por lo que respecta a la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas, Astic prevé, como asegura su presidente, Marcos Basante, que se producirá "una hecatombe", aunque en el sector tiene jornadas especiales de trabajo.
De manera particular, la asociación de transporte internacional calcula que esta medida implicará que cada conductor deje de hacer un 8.000 kilómetros al año.
A este respecto, Astic reclama al Gobierno un estudio que analice el impacto de la medida, al igual que con los coeficientes reductores de la edad de jubilación de los conductores profesionales, para los que Bastante pide que no sean "meros elementos recaudatorios", toda vez que podrían conducir a un incremento de las cotizaciones sociales que recaería sobre las empresas y que podría llevar a que, sin embargo, los conductores no pudieran adelantar su jubilación llegado el momento porque sus condiciones no alcanzarían a ser acordes con el salario que acaban cobrando al final de su vida laboral.
En términos generales, el presidente de la asociación, Marcos Basante, considera que "el proceso de concentración en el sector va a seguir adelante, pero se está quedando gente por el camino".
En el encuentro también se ha puesto en marcha el proceso para renovar, ya en la próxima asamblea de 2026, los cargos representativos de la asociación.