Tras la autorización del Gobierno en diciembre, se ha publicado en el BOE la licitación del contrato de obras para realizar el nuevo acceso viario sur al puerto de Barcelona, que tendrá un presupuesto de 174 millones de euros.
El proyecto consiste en un nuevo acceso viario al puerto de Barcelona por el sur, con sección de autovía, que está coordinado, en los tramos en los que coinciden, con el proyecto del nuevo acceso ferroviario, sobre el que ya hay acuerdo aunque está pendiente de licitación.
El presupuesto de licitación del contrato de obra asciende a 174,16 millones de euros, IVA incluido. A esta inversión habrá que añadir el coste de las expropiaciones necesarias, que se estima en 20 millones de euros, el control y vigilancia de obra, etc. hasta una suma estimada en 200 millones de euros.
Las ofertas podrán presentarse hasta el 26 de mayo y se abrirán el 16 de julio, cuando ya se podrá comenzar a adjudicar las obras. Por otro lado, tendrá un plazo de ejecución de 40 meses, lo que significa que las obras podrían acabar en 2017, a pesar de que los planes de la Autoridad Portuaria de Barcelona incluían que ambos accesos, el viario y el ferroviario, estuviesen listos para 2015.
Alguno de los requisitos exigidos son la capacidad de obrar, no tener una prohibición para contratar, no estar incurso en incompatibilidades, cumplir con las obligaciones de la Seguridad Social y con Hacienda y, en el caso de ser una empresa extranjera, una declaración de sometimiento a la legislación española.
Desde el ministerio de Fomento se considera un proyecto de gran complejidad técnica por situarse en un entorno fuertemente urbanizado.
Constará de tres tramos, siendo el primero un aumento de la capacidad de la Ronda Litoral. Se realizará mediante la construcción de un nuevo carril en ambas calzadas, desde el paso superior de la autovía A 2 hasta el nuevo enlace de L’Hospitalet.
El segundo se trata de una autovía con dos calzadas de dos carriles por sentido, ejecutadas sobre rellenos y muros de contención, entre el enlace de L’Hospitalet y el cruce con la autovía C-31.
Y el tercero, se proyecta un viaducto desde el cruce con la autovía C-31 para albergar ambas calzadas y salvar la zona Franca del puerto en la margen izquierda del Llobregat. Sobrepasado el puente de Mercabarna, el trazado discurría en terraplén sobre el antiguo cauce del río, hoy desecado, hasta conectar con la futura entrada al puerto.