MAN Truck & Bus ha comenzado la producción en serie de sus camiones eléctricos en la planta de Múnich, que a partir de ahora, contará con un proceso de producción mixto para camiones eléctricos y diésel se fabricarán, que estará completamente integrado en la misma línea. Esto implica una gran flexibilidad en los procesos, así como una mejora de la eficiencia de producción, pudiendo fabricarse exactamente en el orden en que se solicitan.
Por otro lado, se trata de un paso de extrema importancia en el camino del fabricante hacia la neutralidad de emisones en 2050. Hasta el momento, ha invertido cerca de 400 millones de euros en investigación y desarrollo para poder ofrecer un portfolio de productos con propulsión eléctrica por batería.
La gama va de 12 a 50 toneladas y abarca desde vehículos de recogida de basuras hasta camiones de larga distancia. Está previsto que los primeros 1000 camiones se entreguen antes de que acabe el año y según su uso y la combinación energética, esto permitiría ahorrar unas emisiones de CO2 comparables a las de una ciudad pequeña alemana.
Además, el fabricante está invirtiendo alrededor de 1000 millones en la transformación de sus plantas en Europa para adaptarlas a la electrificación a lo largo de esta década, destinándose gran parte de la inversión a Alemania. Esta transformación se percibe claramente en la planta principal del fabricante, pues en la actualidad, la capacidad máxima de producción se sitúa en alrededor de 100 camiones al día, independientemente del tipo de propulsión, y más de 5000 empleados han recibido formación en tecnología de alto voltaje.
Antes de iniciar la producción en serie, MAN fabricó y entregó a los clientes una serie preliminar de casi 200 camiones eléctricos, que ya suman cerca de dos millones de kilómetros recorridos en condiciones reales por carreteras de Europa. Hasta ahora, ha recibido alrededor de 700 pedidos de sus camiones eléctricos.
Destaca la denominada Ultra-Lowliner, una tractora ultrabaja con una altura de quinta rueda de solo 950 mm y una distancia entre ejes de 3,75 metros, posibilita el transporte completamente eléctrico con una altura interior de carga de tres metros. Ya se utiliza en Wolsburgo y Baviera como parte de la logística de suministro de automóviles en rutas con distintos perfiles.
Por otro lado, cabe apuntar que las baterías NMC, procedentes de la planta de MAN en Núremberg, ofrecen una capacidad bruta total de hasta 534 kWh con la que es posible recorrer fácilmente hasta 500 kilómetros sin recargas intermedias. En caso de necesitar una mayor autonomía, está la opción de añadir una séptima batería que permite alcanzar 740 kilómetros sin recargas intermedias y de forma completamente eléctrica.