Dlifícilmente puede avanzar el proceso de digitalización en el transporte español sin un marco legal que lo respalde y que otorgue la necesaria seguridad jurídica a las empresas para apostar de una manera decidida y sin riesgos por las nuevas tecnologías.
Un 91% de las empresas del sector transporte y logística ya utiliza soluciones telemáticas para la gestión de sus flotas, de acuerdo con los resultados de un reciente informe sobre las Tendencias en Digitalización de Flotas en España elaborado por Webfleet.
Sin embargo, al mismo tiempo, el trabajo también apunta que solo una minoría de todas ellas ha integrado estas herramientas con sus sistemas de CRM o TMS, lo que refleja un potencial de mejora en eficiencia operativa y atención al cliente.
Beneficios y dudas en la digitalización
Además, el informe revela que los beneficios que produce la digitalización incluyen el control de vehículos, la reducción de costes y una mayor eficiencia en la planificación. No obstante, la resistencia al cambio por parte de los conductores y la falta de formación son los principales obstáculos.
Así mismo, un 17% de los encuestados considera el coste como uno de los retos principales a la hora de digitalizar su flota, lo que indicaría que las empresas cuentan con presupuesto para adoptar sistemas de gestión de vehículos y que son otros factores distintos los que impiden el despliegue de tecnología.
Por otra parte, el informe, basado en más de doscientas encuestas a gestores de flotas en España, destaca una creciente preocupación por la seguridad, el mantenimiento predictivo y la sostenibilidad.
La situación concreta del eCMR
En el caso concreto del eCMR, el último estudio del Centro Español de Logística y Fieldeas refleja que el 94,02% de las empresa encuestadas todavía no lo había implementado entonces, frente a un 5,98% que sí lo había hecho.
De las que ya lo utilizan, según el estudio, el 42,81% son cargadoras, el 28,59% operadores logísticos, y el 28,59% empresas de transporte. Además, el 42,86% lo emplea para entre el 76% y el 100% de sus operaciones, y el 85,71% lo complementan con otras soluciones de visibilidad y trazabilidad.
En cualquier caso, el 80% de las empresas sí ha contemplado implementarlo en el futuro, pues el Ministerio de Transportes, a la espera de que sea obligatorio en 2026.
Entre las empresas que todavía no han implementado una solución de este tipo, el 64,55% sí está familiarizada con el eCMR y conoce sus funciones, y el 56,36% tenía previsto en el momento de la encuesta evaluar la implementación del eCMR a corto plazo.
De hecho, según el estudio del CEL y Fieldeas, el 34,78% de las empresas de transporte considera que están altamente preparadas para adoptar el eCMR. Asimismo, el 71,82% cree que la gestión de flujos en centros logísticos podría mejorar con su implementación.
Las empresas perciben el e-CMR como algo positivo para su actividad, especialmente para mejorar la relación con clientes, pero su ritmo de adopción es lento.
Del mismo modo, el 54,55% considera que su adopción podría fortalecer la relación con sus clientes, aunque un 32,73% no está seguro de los beneficios en este aspecto. Por otro lado, el 79,09% considera que el eCMR mejoraría la trazabilidad y seguimiento de las cargas.
Estos datos, sumados a las conclusiones extraídas de las sesiones cualitativas del estudio, indican que hay factores que están frenando la adopción del eCMR, pues aunque se percibe como un cambio positivo, su uso aún no se ha generalizado.
Principales barreras
La principal dificultad a la que se han enfrentado las empresas que han implementado el eCMR es la gestión del cambio, tanto a nivel interno como externo.
Por otro lado, el 25% de las empresas que ya han implementado esta solución destaca como principal reto los costes asociados, y el 16,6% hace referencia a la falta de conocimientos técnicos.
Además, las empresas denuncian una falta de homogeneización entre los países europeos respecto al eCMR y de España respecto a otros países vecinos.
Así mismo, la empresas reclaman a la Administración a que se implique de una forma más proactiva en este proceso e impulse acciones divulgativas y formativas, especialmente para conseguir una estandarización en la digitalización documental que tenga en cuenta la colaboración entre las diferentes partes involucradas.
Ventajas del eCMR
A pesar de las diversas barreras y desafíos, las empresas que no han adoptado todavía el eCMR perciben sus beneficios como altos en un 51,82% y muy altos en un 17,27%.
Según las encuestas realizadas a empresas que sí han implementado el eCMR, un 21% apunta como principales beneficios la mejora de la trazabilidad y seguimiento de cargas, y el mismo porcentaje hace referencia a la reducción de errores relacionados con la gestión documental.
Mientras, un 20,4% destaca la reducción de tiempos de procesamiento de la información, el 19,7% se centra en la mejora de la eficiencia de sus operaciones de transporte, y el 17,6% incide en la mejora de las operaciones de carga y descarga.
Asimismo, el 39,44% ha notado una mejora en las relaciones con los clientes, mientras que un 30,99% ha experimentado mejoras en la interacción con reguladores y autoridades, y un 29,5% destaca la mejora de la relación con sus socios.
Evitar la parálisis política
En este contexto, sin embargo, la artimética parlamentaria y la debilidad del Gobierno impiden que salga adelante la Ley de Movilidad Sostenible, que es la que se encarga de desarrollarla digitalización de la documentación del transporte
La gestión del cambio, el coste o la falta de armonización son las principales barreras en el uso del e-CMR.
Para intentar evitar esta parálisis, más recientemente, el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha sacado este pasado mes de julio a consulta pública previa un proyecto de Real Decreto que modificará la regulación de la cualificación inicial y la formación continua de los conductores, las excepciones a la obligatoriedad de las normas sobre tiempos de conducción y descanso y el uso del tacógrafo en el transporte por carretera, así como el uso de los documentos de control y hojas de ruta electrónicos.
Por un lado, por lo que respecta al CAP, Transportes estima que, finalizada la situación de pandemia, es necesario prever la utilización del aula virtual para la formación CAP, atajar determinadas irregularidades en los exámenes CAP y prever sistemas de acceso alternativo a los centros CAP, entre otros aspectos.
Así mismo, el Ministerio también quiere ampliar determinadas excepciones a la obligatoriedad de las normas sobre tiempos de conducción y descanso y el uso del tacógrafo en el transporte por carretera para favorecer el uso de vehículos de cero emisiones.
Finalmente, Transportes quiere modificar el ROTT para impulsar la obligatoriedad de la comunicación de los datos contenidos en los documentos de control y hojas de ruta por vía electrónica, en línea con el Reglamento europeo sobre información electrónica relativa al transporte de mercancías y sus reglamentos de desarrollo.