En el primer semestre de 2025, la cuota de mercado de China en la contratación de nuevos encargos de buques pasó del 72% al 52%. La creciente preocupación por la aplicación de nuevas tasas portuarias por parte de Estados Unidos a los buques chinos que lleguen a sus puertos drobablemente contribuyó a una disminución de la contratación en el país asiático, lo cual se vio amplificado por una caída en la contratación global de buques y un cambio en los tipos de buques encargados.
Las tasas portuarias, que entrarán en vigor en octubre de 2025, afectarán tanto a los armadores y operadores chinos como a los buques construidos en China. No obstante, se contemplan exenciones para los buques más pequeños, así como para los viajes de corta distancia, según explican desde Bimco.
La contratación mundial de nuevos buques en términos de tonelaje bruto compensado se redujo también un 54% interanual durante el primer semestre, ralentizándose significativamente en el caso de los graneleros, petroleros y gaseros, en un contexto de debilidad de los fletes. Los portacontenedores y los cruceros fueron los únicos segmentos en los que aumentó la contratación.
En este sentido, cabe apuntar que China ocupa una posición de liderazgo en la industria mundial de la construcción naval, ausente únicamente en el sector de los cruceros. En 2024, los gaseros fueron el único sector en el que ocupó el segundo lugar, por detrás de Corea del Sur, que en lo que va de año, también ha superado a China en la construcción naval de petroleros de crudo.
En cualquier caso, aunque los armadores intenten evitar encargar buques en China debido a las tasas, la capacidad disponible fuera del país es limitada. Si la contratación mundial de buques no hubiera caído significativamente al comienzo del año, la cuota de China habría sido probablemente mayor.
Igualmente, la limitada capacidad de construcción naval ya ha provocado que se acumule una gran cartera de pedidos con largos plazos de entrega, especialmente para buques de mayor tamaño y para portacontenedores, gaseros y cruceros. De la contratación de este año, se espera que el 31% se entregue en 2027, el 38% en 2028 y el 23% después.
Corea del Sur y Japón son los países que ocupan la segunda y tercera posición respectivamente en construcción naval, pero se enfrentan a diferentes retos para ampliar su capacidad de producción, como la escasez de mano de obra y el aumento de los costes laborales. En conclusión, es poco probable que la posición dominante de China en la construcción naval cambie pronto de forma significativa, pero podría enfrentarse a una competencia cada vez mayor a medio plazo.
Así, Filipinas y Vietnam, pequeños productores de graneleros y petroleros, podrían aumentar su producción, beneficiándose de los bajos costes laborales. Mientras, Estados Unidos e India, con una capacidad limitada de construcción naval, están trabajando activamente para reforzar sus industrias nacionales, aunque aún tardarán en aumentar su producción.
